¿¡UN QUÉ!? (WOOSAN) (MPREG)

13

Wooyoung  está dormido en una mala posición, cuando abre sus ojos, su cuello duele demasiado, siente sus ojos pesados, porqué estuvo inquieto toda la noche y acaso si durmió una o dos horas.

Lleva su mirada a la camilla, donde su novio esta con la respiración tranquila y la piel pálida.

Verlo así hace que quiera llorar de nuevo, porque él ha sido un mal novio, algo que nunca se lo perdonara.

— Buenos días — el doctor que atiende el caso de San entra a la habitación, sonriéndole cálida mente — ¿Cómo esta, señor Jung?

— Bien — murmura por educación, porque él quiere saber cómo esta San.

— Me contenta — el doctor asiente, revisando unos papeles que tiene en las manos.

— ¿Cómo está mi novio? — la pregunta se escapa rápidamente de sus labios, porque esta tan ansioso.

El doctor sonríe, enternecido por la angustia del hombre frente a él.

— Él está muy bien — lo mira, acomoda sus gafas — Solo fue un desmayo.

— Gracias a Dios — Wooyoung suspira, pero la preocupación sigue en su rostro — ¿Y él bebé? — pregunta al fin, porque tiene demasiado miedo de oír la respuesta.

El doctor lo mira de nuevo, y luego regresa su vista a los papeles.

Wooyoung siente que el tiempo es eterno, algo en sus oídos pita y quiere retroceder el tiempo, porqué...

— El bebé también está muy bien — sonríe — Un bebe muy sano.

Puede sentir como el alma le vuelve al cuerpo, como que si un peso demasiado grande hubiese sido retirado de sus hombros.

Ve a su novio quien sigue durmiendo.

— ¿Y porque se desmayó? — pregunta después de un momento.

— Mucho estrés — responde con suavidad, mirándolo — El señor Choi ha estado bajo mucho estrés y como está embarazado eso no le hace bien — tose, por qué no quiere incomodar a Wooyoung, ya que ve que su mandíbula se tensa — Ni a él ni al bebé — aclara

Asiente.

Es su culpa.

De nuevo es su culpa.

— Gracias — dice en un murmuro, por qué no sabe que más decir.

El doctor solo asiente, se da vuelta para retirarse pero se detiene.

— Se me olvidaba — comenta, buscando algo en sus papeles — En ningún hospital o clínica tenían registro del señor Choi, eso quiere decir que no ha ido a ninguna consulta médica.

— ¿Qué?

Wooyoung quiere llorar. Su voz sale tan débil.

— Es peligroso que un doctor no lo esté revisando y chequeando para asegurarse que todo va bien —suspira, porque no quiere preocuparlo — Es necesario que acuda a uno, después de todo, en los hombres hay más riesgos que en una mujer embarazada.

— Gracias — murmura de nuevo.

El doctor esta vez si se va, deseándole lo mejor de todo a los dos.

Wooyoung solo se queda observando a su novio. Recuerda la vez que lo conoció, tan delicado y tierno con sus movimientos, como le coqueteo sin descaro alguno. Suelta una risa, porque ese día San estaba tan ebrio y se tambaleaba de un lado a otro.

— ¿Woonie? — un leve murmullo lo saca de sus pensamientos.

Los ojos marrones de su novio lo ven detenidamente, están algo cansados y él se promete hacer cualquier cosa para verlos brillar de nuevo.

— Mi amor — susurra suavemente, sonriéndole — ¿Cómo te sientes?

San parpadea, le duele un poco la cabeza.

— Mal — admite — Me duele el cuerpo.

— El doctor dijo que es normal — lo tranquiliza, besando su frente — Solo tienes que descansar.

Asiente, cerrando los ojos. Puede oír como Wooyoung tranca la respiración, y sabe que está a punto de llorar.

— No llores — susurra, observándolo — ¿Por qué lloras?

— Es mi culpa — Wooyoung ahoga un sollozo — Estas en esta camilla por mi culpa.

San le sonríe.

— También es mi culpa — admite —No había venido a un doctor desde que estoy embarazado.

— Lo siento, Sannie — dice, sus labios temblando — Lo siento muchísimo por no estar ahí para apoyarte y cuidarte.

— Shh, está bien — murmura, agarrando su rostro entre sus manos — ¿El bebé está bien cierto? — asiente — Bueno, es lo que importa, y que ahora tú estás conmigo.

— Te amo, mi amor, te amo — lo besa tan desesperadamente, buscando sus labios, porqué eso lo tranquiliza.

— También te amo, Woo, mucho.

°°°

— ¿Necesitas algo más ? —Wooyoung pregunta, viéndolo detenidamente.

San ríe, porque su novio se está comportando tan sobreprotector.

— Estoy bien — dice, porque en realidad lo está.

— Te preparare un té — asiente, porque no quiere quitarle la emoción — Ya vuelvo.

Wooyoung desaparece de la habitación, directo a la cocina.

San suspira, acomodándose un poco más entre todas las sabanas y almohada que Wooyoung puso a su alrededor.

Esta tan feliz que las cosas con su novio hayan mejorado.

— Aquí tienes — después de un momento Wooyoung aparece de nuevo en la habitación, le extiende la taza de té, sonriéndole — Espero que te guste.

Da un trago, tarareando en aprobación.

— Esta delicioso, gracias — Wooyoung solo sonríe, parado a un lado de la cama, observándolo de esa manera que hace que su corazón lata demasiado rápido.

— Acuéstate conmigo — dice, haciendo un puchero con sus labios.

Jung se muerde el labio inferior, por qué no puede resistirse a ello.

Así que se quita los zapatos y la camisa, quedando solo en pantalones. Se mete bajo las sabanas con su novio.

Intentan buscar una posición que les favorezca a los dos, y después de muchos intentos, consiguen una.

— Bebé — Wooyoung murmura en su oído.

— Hmn — es lo único que es capaz de pronunciar, estar así le gusta tanto.

Wooyoung tiene su espalda contra la pared, con las piernas abiertas, San entre ellas, con su espalda apoyada en el pecho de su novio, sus brazos alrededor de su abultado estómago.

— No puedo creer que me haya perdido de esto — susurra, acariciando su estómago — Soy tan idiota.

— No pasa nada — San sonríe, apoyándose más en él, colocando su cabeza entre el cuello y hombro de su novio — Aún quedan 5 meses de mi embarazo.

Wooyoung ríe contra su cuello, dejando un beso.

— Los disfrutaremos al máximo — promete.

— Por cierto — San murmura, arrugando el entrecejo — ¿No deberías estar en el trabajo?

Besa su mejilla y luego su mandíbula.

— Pedi la tarde para pasarla con mi lindo novio.