Una historia soñada

Un día diferente...

Desperté y tomé mi celular para ver los whatsapps, instagram y facebook.

Ví una foto en instagram de Alexis, en la moneda con toda la Selección Chilena, y todos los chilenos que pudieron a ver ido.

-Buenos días fea-. Dijo mi mejor amigo entrando a mi habitación.

-Buenos días Grinch-. 

-Hazme un lado-. Me dijo tomando las sábanas y acostandosé a mi lado.

-¿Amaneciste cariñoso o tuviste pesadillas?-. Pregunté.

-Tuve una pesadilla-. Confesó.

-Lo supuse-. Dije abrazándolo.

Prendí la tele y vimos los monitos de nuestra infancia mientras nos dábamos el ánimo para levantarnos.

-¿Y ustedes?, ¿No invitan?-. Dijeron mis amigas entrando a mi pieza, y se acostaron con nosotros.

Menos mal que mi cama es de dos plazas...

Estuvimos toda la mañana acostados, hasta que me tocaron la puerta, entra Alexis hasta mi cuarto y nos ve a las cuatro acostados.

-Shaaaa, que son flojos-. Fué lo primero que dijo.

-Mi amor!-. Grité, me puse de pié sobre la cama, él se acercó y me tomó, haciendo que pusiera mis piernas alrededor de su cintura, posando mis labios sobre los suyos.

Me bajó y procedió a saludar a mis amigos, para luego abrazarme de nuevo.

-Te venía a invitar a almorzar-. Dijo mi novio.

-Oh me encantaría, si me esperaras 20 minutos estoy lista-. Dije lléndome corriendo al baño para ducharme.

-El tiempo que te dijo multiplicalo por dos-. Dijo mi mejor amigo.

-No le creas nada!-. Grité desde el baño, metiendome a la ducha.

Me dí la ducha más corta que jamás me había dado en mi vida, me puse una toalla alrededor de mi cuerpo y me comencé a cercar el pelo con el secador.

-Valeriaaaaa!, sácame una teñida del closet!-. Grité desde el baño.

Después de secarme el pelo comencé a alisarlo, y a peinarlo, al momento después llegó mi amiga con la ropa en la mano.

-Gracias china, eres la mejor-. Tomé la ropa, me saqué la toalla y me vestí lo más rápido que podía.

Me puse una polera blanca, larga, junto con unos jeans, unas zapatillas blancas y tomé mi pelo en una cola baja.

Me maquillé los ojos y un poco los labios, para que no se notara tanto mi cara de recién levantada.

-Estoy lista-. Dije saliendo del baño.

-Estás hermosa-. Me dijo mi novio.

-Muchas gracias-. Dije sonrojandome.

-¿Vamos?-.

-Vamos. Encima de la mesa les dejo la tarjeta para que compren comida, trio de flojos-. Les dije antes de irme.

-Nosotros igual te amamos!-.

Para cuando salimos de casa había un sol precioso, bueno, el día estaba precioso.

Ya bueno, en realidad, desde que estoy con Alexis todo me parece hermoso....

-Adelante princesa-. Abrió la puerta del acompañante, como todo un caballero.

-Muchas gracias bebé-. 

Apenas encendió el auto Alexis puso música que por lo menos se podría escuchar a cuatro cuadras más.

-Peleamos, nos arreglamos nos mantenemos en esa pero nos amámos, ay vamos ahh...-. Comenzó a cantar, haciendo que negara con la cabeza y sonriera a la vez.