Akagami no shirayukihime

El cumpleaños de la princesa

           

Después de que Zen diera una explicación detallada de cómo llegaron a ese punto todos se alistaron para asistir a la fiesta de cumpleaños de la princesa Izumi, Shirayuki se fue a dar un breve baño, Mitsuhide, Kiki y Obi se pusieron de acuerdo para estar de guardias ya que se vería demasiado grosero tener a los guardaespaldas por que se vería como si desconfiaran de la seguridad del castillo lo cual es un completo insulto para ellos.

—Mitsuhide, ¿Empacaste el regalo?

—Si...

— ¿Y por qué no lo encuentro? —

—Tal vez porque esa no es su maleta— Dijo Kiki molesta

Zen quien no se había dado cuenta de que era la maleta de las chicas por la ropa masculina de Kiki solo saco ambas manos teniendo en una de ellas un sostén. Mitsuhide quien reacciono reaccionó rápido, se puso enfrente de Zen cubriéndolo así Kiki no le pudiera hacer algo. Zen aun sin saber a qué iba todo eso, miro a Obi que venía entrando por el balcón se le quedo viendo unos segundos.

—Wow, que peque-

Mitsuhide lo interrumpió tapándole la boca con una risa falsa. Zen miro lo que tenía en la mano y de un brinco se cayeron, Zen se sonrojo un poco y Mitsuhide sin querer pelea con su compañera los saco del cuarto.  

Pasaron alrededor de dos horas para que todos estuvieran listos, la cena apenas había empezado, ahí se encontraban muchas personas de alto rango celebrando el cumpleaños de la princesa.

Zen se encontraba en la mesa sentada alado de Shirayuki, Obi estaba atacando la mesa de aperitivos y Mitsuhide y Kiki ni se dirigían la mirada. Zen intentado liberar la tensión por la serie de mal entendidos desde que llegaron,  intento entablar una conversación –misión fallida-. Tras una disputa en su cabeza sobre qué hacer decidió quedarse callado.

—Zeen~— La princesa se acercó y lo abrazo del brazo obligándolo a levantarse de su lugar. —Mi padre quiere hablar contigo— Dijo ella sonriendo de oreja a oreja.

— ¿Hablar?, ¿conmigo?, ¿sobre qué? — Él ya había hablado con el rey, solo que siempre se encontraba su hermano mayor, pero para su mala suerte él no estaba aquí.

—Haha, no te pongas nervioso, no te hará daño

Se rio falsamente y asintió.

—Entonces... ¿cuál es el asunto del cual quiere hablar?

—No hables así que me asustas.

—Pero así es como se le debe hablar a una princesa

—y de eso hablaran. — le guiño el ojo y lo dejo con su padre... EL REY.

WOW, ni yo me puedo creer que enserio estoy editando esta historia y no la otra, la razón hasta yo la desconozco, así que si, esta historia puede llegar a tener un futuro ;)

Atte: K-Y-K