Hoy se mudará por completo mi hermanastro a la casa de mi madre. Estoy nerviosa pero a la misma vez super contenta porque lo tendré cerquita de mi. Afín de cuentas no lleva mi sangre y todo puede pasar.
¡Llegaron!- Grita mi madre desde la planta baja.
Doy un salto de la cama que quedo parada frente al espejo para terminar de arreglarme y bajar a recibir a mi "hermanastro". Cuando terminó de arreglarme finalmente bajo.
¡Hola bienvenidos a su casa! - Digo aun faltando dos escalones.
Muchas gracias- Dicen mi hermanastro y mi padrastro al unísono. Al escuchar su voz casi me estremezco.
Cariño llevas a Stephen a su habitación- Dice mi madre mirándome fijamente y rápidamente asenti.
¿Cual es la habitación que será para el?- pregunto
-Su habitación será la que esta frente a la tuya, espero que no te moleste.-dice mi madre poco preocupada.
¡No no, para nada!- Dije ocultando toda la felicidad que tenia yo por dentro.
Ven Stephen te llevare a tu habitación y también cada parte de la casa- Digo sonriendole un poco amable. El asiente y rápidamente sube detrás de mí. No es por nada pero siento que me mira el trasero.
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Enamorada De Lo Prohibido
Ficção AdolescenteDonde la seducción es un juego excitante... "Mamá, sé que somos hermanastros, pero nos gustamos."
