"No vuelvas nunca"

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Oliver acerca la silla de ruedas que estaba afuera del cuarto y me deposita en ella, veo el vendaje que también lleva en la mano y lo miro sintiéndome culpable

-lo siento mucho Oli. -sabe a lo que me refiero y niega lentamente.

-no fue nada, además es un lindo adorno. -bromea refiriéndose a la venda.
Leo se nota aún preocupada al igual que Iván y yo trato de tranquilizarlos.

-Chicos yo también estoy bien, ya cambien esas caras. -ambos me sonríen pero no están convencidos.

-Nos asustamos mucho en cuanto vimos el desastre de los cristales rotos y el reguero de sangre. -Leo esta al borde de las lágrimas.

-No Leo, no llores, ya viste que estamos bien. -la tranquilizo.

-No sabía que te había sucedido, era mucha sangre. -por su mejilla rueda una lágrima y me siento terrible, jamás había visto a Eleonor de esa forma.

-Alex, no sabíamos que hacer ni a quien llamar, no pensábamos que estabas con Oliver así que tuvimos que llamar a tu mamá. -abro lo ojos como platos y no se que decir.

-llamaron a mi mamá?-diablos no tuvieron que haber hecho eso jamás.

-tranquila ella no contesto en teléfono. -me explica Leo y yo suelto un suspiro de alivio.

-Y entonces vimos tu celular en la mesa y... -Iván se queda a media frase y yo arrugo la frente sin quitarle la vista de encima.

-llamaron a tu hermano pero el tampoco sabía nada así que este llamo a tu padre y le informó lo poco que sabía. -me quedo helada y con la boca abierta, inconsientemente he dejado de respirar y ahora todo vuelve a darme vueltas, me aferro a las reposaderas de los brazos de la silla como si pudiera caerme en cualquier momento por no sostenerme bien.

-Alex, no sabíamos que otra cosa hacer, y tu padre me devolvió la llamada, para esto ya estábamos informados de lo que te había sucedido y le explicamos que estabas bien pero... -maldición paren de dejar las frases a medias.

-el vendrá cierto? -Aún sin mirarlos asíntiendo a los tres al mismo tiempo como perritos de tablero de coche, yo ya sabía la respuesta y eso me aterraba.

Desde el divorcio, mi padre había peleado por mi custodia pero obviamente se la dieron a mi madre, así que desde entonces el busca cualquier descuido de ella para presentar la queja ante el juez y por fin se la den, si el supiera la verdad de como es mi vida desde que el se largó y decidió abandonar a mi madre, hace tiempo que el juez se la habría cedido pero si mi hermano y yo ocultamos todo eso no es porque quiera permanecer al lado de mi madre, al fin y al cabo ella jamás está cuando la necesito y Daniel lo oculta porque yo se lo pido porque las razones por las que no quiero irme a vivir con mi padre y su nueva esposa están delante de mi en este cuarto de hospital, esas razones son mis amigos y mi novio, los únicos que demuestran que les importo y me quieren tanto como yo a ellos.

-Ya resolvere esto en cuanto él llegue. -esto será muy difícil y seguramente será un caso perdido y en menos de dos semanas estaré tomando un vuelo directo a Nueva York para ir a vivir con mi padre y su maldita esposa.

Llegamos a casa y está vez Iván se ofrece para subirme cargando a mi habitación, Oliver se niega pero yo lo convenzo diciendole que también tiene que cuidarse la mano, Leo se queda abajo limpiando el desorden de los cristales mientras Oliver limpia la sangre del suelo, el sillón tendré que tirarlo, esa mancha de sangre no saldra jamas.
Iván me sienta en la cama y me acomoda la almohada.

-Gracias por todo Iván.

-No es nada muñeca,ahora trata de descansar un poco.

-Sólo fue un pequeño corte en el brazo y una torcedura en el tobillo, no me atropellaron.

"Promete... que no vas a prometerme nada"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora