Pase adelante lentamente, con la cabeza agachada, mirando al suelo, cuando llegue adelante y me di vuelta mirando al aula, moví mi pierna intentando parecer "nerviosa".
-Me llamo Atina Lopez, tengo 17 años-termine de decir y cuando estaba dispuesta a ir a mi lugar la voz del profesor interrumpió mi trayectoria.
- Señorita Lopez no tiene nada más que comentar a la clase- me mordí fuertemente el labio para no contestarle de mala manera.
-No- hable de forma "tímida".
-Bien, puede sentarse- y con estas palabras me dirigí a mi asiento, debo ser discreta, si sigo siendo la "Rebelde", empezarán a sospechar.
Al sentarme levanté la mirada para encontrarme con Sara levantando una ceja.-Como es esto, eres rebelde o inocente?- comento ella, simplemente genial, otra actuación que debo hacer.
-Lo siento, me levanté con el pie izquierdo y me descargue contigo, te quise buscar de vuelta pero no te encontré - dije con la mayor pena fingida, estoy considerando seriamente en trabajar de actriz (sarcasmo).
-Bueno, ya no importa, amigas- me dio la mano, lo pensé un poco mirando la mano dudosa y luego sonrei.
-Amigas- estreche su mano, tal vez algún día me pueda salvar de alguna travesura.
Y me dediqué a escuchar al profesor totalmente aburrida.(...)
Sonó el timbre declarando el final de la hora me levanté y agarre mi mochila para dirigirme al comedor. Y me senté en una mesa lejana, al poco tiempo llega Sara, y se sienta a lado mío.
-Por que no me esperaste cuando grité que me esperarás - "por que quería escapar de una molestia" pensé con fastidio.
-No te escuche- comenté con una sonrisa de "pena".
-Bueno- dijo haciendo una mueca insegura. Mantuve mi mirada en la comida mientras comía, hasta que sentí una mirada penetrante y la busqué hasta chocar con unos bonitos ojos celestes. Sara se dio cuenta que lo estaba mirando y hablo - Es Ian Rodriguez, no te lo recomiendo linda, ese chico cree que las relaciones son un juego, cambia de chica como nosotras cambiamos de ropa, sus padres están muy decepcionado- terminó de hablar.
-¿Y quien no lo estaría con un hijo así?- pregunté con obviedad.
-Pero es diferente... - levanté una ceja- es muy diferente, su padre es jefe de la comisaría más impresionantes y su madre es una detective profesional, imagínate ningún criminal se les escapa- se acercó para susurrar - dicen que quieren descubrir a "la princesa de Satanás"-
-No lo creó, muchas comisarías la persiguen hace tres años y nunca la atraparon - defendí mi puesto - además como sabes tú eso...- Ella tomo un color escarlata.
-Lo escuche cuando Mateo y Ian estaban hablando - tartamudeó.
-Mm... algo me dice que te gusta Ian- en realidad ni es así pero quiero aclarar mis sospechas.
-Clara que no, jamás sería su juguete - negó rápidamente y con una sonrisa llena de picardía agregó - además él es sólo tuyo- hice una mueca.
-Entonces te gusta Mateo- ella se sonrojo y yo abrí mis ojos de la sorpresa fingida - ¡Te gusta...- no pude terminar por que me calló tapando mi boca con su mano y no me di cuenta que habíamos llamado la atención hasta ahora. Note que Mateo miraba decepcionado a Sara.
Agh, que asco, yo creo que el amor no existe, que sólo son ilusiones que crean el cerebro, por que muchos sufren por amor, mientras que otros sufren cosas peores y no andan llorando dándoles pena a los demás. A parte ¿que consigues si te enamoras?, Una nueva distracción, un problema, miedo a que te rompan el corazón,pero sobre todo, una debilidad .-Hola, tierra llamando a Atina- chasqueo sus dedos adelante de mi cara, estoy muy impresionada de como todavía no herí a Sara -oye ¿en que pensabas?- "en que sé 50 tipos diferentes de como romper un hueso y quería ponerlo en práctica contigo" pensé. - Ahh, ya sé, en Ian-
-Espera... ¿que?- hay diablo ayuda me que en cualquier momento la mato.
-Si te atrape traviesa - yo sonrei inocentemente, aguantandome las terribles ganas de burlarme para luego matarla. Aunque si su padre y su madre me están buscando y me acerco a ellos lo suficiente como para ganar su confianza y saber cada una de sus jugadas, no solamente abre engañado a las dos personas más inteligentes y astutas que allá existido, sino que también todos me temerán más de lo que lo hacen. Aparte de que puedo entrar y jaquear la computadora donde tiene información sobre mi y agregarle cualquier cosa y así mientras voy conociéndolos ellos tendrían sospechas sobre otra persona, pero la única forma de acercarme es que enamore a Ian de mi, no creo que yo me enamoré de él pero solo un error y me atrapan.-¡Atina!- yo la mire sorprendida - ya me estabas asustando, pusiste una sonrisa macabra que no me gustó para nada-
-Sara ¿que tipos de chica les gusta a Ian?- ella me sonrió burlonamente.
-Ya te dije a Ian no le gusta ninguna chica, sólo las usa- "si vas a responder sé útil" pesé.
-Ya sé, pero quiero saber qué tipo de chica usa?- pregunté.
-Bueno siempre son lindas, tontas, zorras y muy pero muy perras- bueno lo perra me sobra pero debo actuar como una adolescente común y corriente y sobre todo inocente, así que no habrá problema, todavía no me acosté con ninguno de acá, así que no soy zorra, soy muy inteligente y astuta, lo tengo que demostrar, lo único que no debí cambiar es mi físico, debo siempre estar linda para así él se fijará en mi. Si soy todo lo contrario a las demás chicas le llamaré la atención y sino funciona ese plan, entonces ni me queda de otra que dejarlo con ganas de acostarse con migo. Esto es una guerra y planeó ganarla.
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Nota de autora: subi otro capítulo por que la anterior semana no tuve tiempo, espero que les guste. 😎
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La Princesa De Satanas
AcciónNo te fíes de su cara bonita, por que tiene aspecto de Ángel pero es peor que un demonio Tiene nombre, pero nadie la conoce. Mata y tortura por placer. No tiene debilidad, es demasiado fuerte, ha hecho tantos crímenes que la policía la busca como l...