ONE SHOT

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No sé cómo las cosas se habían vuelto así y todo empezó cuando fuimos a una misión juntos, lo que paso desde ese punto me ha hecho dudar de muchas cosas y desde ese momento se está volviendo un dolor de cabeza y nervios por todo mi ser, sé que suelo actuar infantil y solo para molestar y des-estresarme, pero desgraciadamente últimamente he estado más serio que de costumbre.

Atsushi en aquella misión se transformó por completo en tigre para salvar a kyoka, cuando quise borrarle su poder y regresarlo a la normalidad no pude y Atsushi acabo desmayado, después de cargarlo con un esfuerzo sobrehumano hasta que llego Kenji y nos ayudó llegamos a la agencia, después de que el presidente nos regañara Atsushi despertó y con suma atención veía al presidente, después de volver a intentar traerlo de vuelta obteniendo el mismo resultado el presidente me ordeno que lo cuidara y desde ahí las cosas se pusieron raras.

Atsushi actuaba diferente con todos, al presidente y a Kunikida les prestaba atención a Rampo le gruñía a menudo, con Akiko siempre huía y con los demás actuaba neutral solo con Kyoka permanecía más quieto y permitía que le tocara, a diferencia de mi a quien siempre se le pegaba y me pedía mimos como si fuera un gato, al principio me molestaba después se me hizo normal.

Habían pasado 3 días cuando con cautela llegamos a la agencia y Kyoka lo saludo y después soltó un

-¿De verdad te sientes extraño ahí? - y fue cuando todos le prestamos atención preguntando si podía entenderle- bueno no podía al principio, pero por extraño que parezca si lo miras detenidamente sabes lo que trata de decir- decía seria como era ella- Atsushi está la mitad de sí mismo y mitad de los instintos del tigre- soltó y nos sorprendimos y fue ahí cuando casi gritaba sorprendido.

Si Atsushi estaba consiente (instinto) entonces porque cuando íbamos a casa me tumbaba en el futón y comenzaba a lamerme la cara y el cuello, lo peor era que mi poder no le hacía nada asustándome y cohibiéndome cada vez más.

Me preguntaron si algo me pasaba e invente una excusa con lo del suicidio, los próximos 3 días trate de buscar formas de suicidarme y él siempre lo arruinaba cuando mencionaba una chica me gruñía y me tumbaba una de las ocasiones me mordió levemente el hombro y se alejó no se acercó hasta la noche a dormir a mi lado, mis sentimientos estaban dispersos no sabía que pensar estaba mal no?, deje de pensar todas las noches en chicas lindas porque siempre aparecía la imagen de Atsushi aparecía en mis sueños haciendo cosas realmente que me levantaban exaltado sin creerlo.+

Los días pasaron y una mañana Atsushi ya estaba de vuelta o eso creí se veía como el con el simple hecho que sus ojos eran del tigre y tenía marcas en su cara orejas y una cola, cuando despertó lo primero que hizo fue tirarse sobre mi besándome, de nuevo mi poder no sirvió para nada simplemente le voltee un coscorrón y me gruño, genial había vuelto y no podía hablar.

De nuevo en la agencia se sorprendieron, pero lo raro era que no podía hablar y para usar sus manos se estaba volviendo torpe, por suerte Kyoka lo entendía, pero al parecer ni el mismo Atsushi controlaba al bien los instintos que tenía.

Últimamente Atsushi se había vuelto más dócil ya no me volcaba ahora parecía que me suplicaba con esa cara que le hiciera mimos, no podía controlar muy bien esta situación todo entremezclado pero esa cara me toco un punto que yo pensé que no tenía ni siquiera con una chica linda, en vez de que me volcara lo volqué.

-Atsushi-kun esa mirada no deberías mostrarla- decía acercándome a el- o de lo contrario podría mal interpretar y hacerte algo- por un momento aprecio sorprendido y uno de sus ojos volvió a la normalidad.

Segundos después me mostro su cuello, me tomo entenderlo era una forma de dar su permiso para que le hiciera algo, mi mente se bloqueó y por impulso le hice un chupetón su respiración entrecortada hizo que me alejara y saliera del cuarto.

No sabía qué diablos trataba de hacer, me estaba seduciendo, lo sabía, ¿lo hacía por instinto?, salía a caminar y decidí beber un poco en nuestra cafetería favorita, la chica se sorprendió de que no tratara de coquetearle, pero no dijo nada solo la sabia por su mirada, bebiendo vi cómo se sentó Kyoka frente mío.

-Dazai-san debo decirle algo que Atsushi-kun me dijo- decía y la mire- Atsushi-kun tiene una pelea interna consigo mismo por un sentimiento que tenía mientras hacíamos la misión- bebió un poco de té- Atsushi-kun está enamorado- me dijo y creí que era ella hasta que hablo- pensó que era admiración por aquella persona que le salvo sin obtener nada a cambio quien le enseño que no era un monstruo, que podía ayudar y aprender a usar su poder- mi cara era de asombro- aquella persona que le enseñó sueño todo estaba perdido Dazai-san- me dijo me pare rápido pague y me fui la chica se sorprendió de que había pagado antes de salir.+

Corrí hasta llegar a mi cuarto y lo vi ahí al parecer estaba llorando la luz que entraba en la oscuridad me dio darme cuenta de que ya era el de regreso, me escucho y con esos ojos llorosos me miro.

-Dazai-san- fue lo único que le permití decir todo en mí se aclaró con aquel beso.

Tomándolo en un abrazo, delicadamente probando esos labios su cara era de asombro, pero no se resistió, poco a poco lo fui acostando en el futón besándolo en el cuello repetía mi nombre cada vez más entrecortado su respiración era agitada su corazón resonaba cuando me levante y comencé a desvestirlo no dude en decirle.

-así que Atsushi-kun el que hicieras todo eso mientras eras un tigre era porque ¿realmente querías llegar a esto? - le dije seductoramente y su cara se puso roja puso sus brazos sobre su cara y soltó

-me gustas- simplemente dijo.

Y proseguí desvistiéndolo besándolo dejando marcas no decía nada más que mi nombre entre gemidos, finalmente me quite mi ropa le bese y le susurré al oído.

- Atsushi-kun esto puede doler, pero tendrás que ser más que paciente- le dije mientras metía un dedo en su entrada y le lamia la oreja.

Después fui metiendo más dedos, el solo se tapaba su cara y no pude evitar sonreír cuando entré en él y se aferró al futón.

-Atsushi-kun aquí sostente- decía mientras pasaba sus manos a mis hombros.

Comencé a penetrarlo y gemía a todo lo que deba realmente me estaba gustando bastante lo que oí y lo que tenía debajo de mí.

-Atsushi-kun- le decía- lograste meterte en mi mente y ya no te quiero sacar de ahí- le dije y me miro sorprendido fue cuando aumente la velocidad.

-Dazai-san!! Dazai-san!!- me gritaba.

Su interior se estaba contrayendo demasiado apretándome más ya sabía que no duraríamos y finalmente nos corrimos cansados caímos en un sueño.

A la mañana siguiente le di un beso y despertó no se podía levantar, pero debíamos trabajar, así que un poco de mi ayuda llegamos a la agencia todos notando que Atsushi estaba mejor y peor por su andar cuando le preguntaron Sonreí.

- Atsushi-kun se puso muy lindo anoche- dije y todos me miraban divertido hasta que sentó un golpe.

-DA ZA I - SAN!!!! NO DEBERIA DECIR ESO- si Atsushi se había molestado.

Todo regresaba como antes podía molestarlo, pero ahora también podía domarlo porque díganme quien no quisiera domar a una bestia tan linda como él.

**DOMANDO A LA BESTIA**Donde viven las historias. Descúbrelo ahora