Capitulo2.-Fiesta confusa

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Por la tarde Salí con Federico a comer al restaurante de la vuelta de mi casa la verdad somos fieles a ese lugar era donde siempre nos  encontrábamos desde que tenemos memoria, nos encantaba observar las fotos de casi todos los cantantes de rock que admirábamos, aquellos tiempos perfectos.

 - Bueno pequeña ya sabes ¿qué ordenaras? Pero… ¡por favor!  Que sea comida.- Federico me miró mientras se reía de tan agria broma.

 - una pizza de salami, jamón con extra queso y una malteada al estilo Turnne's  -Le respondí con emoción.

- Excelente elección pequeña pues yo pediré....-enseguida observe como Federico salto a mi lado.- Isabella ¡¡¡¡escóndeme!!!! .- Federico me partió las piernas al esconderse recostándose en ellas.

-¿Qué te pasa? Loco de mierda.-Le exprese mientras lo miraba hacia abajo… de repente vi a la odiosa Ana lawts la zorra de etiqueta- ¡NOOO! Todo estaba perfecto hasta que empezó a oler a mierda, creo que la pizza que ordenaría se la estrellaría en la ¡¡nalga!! Ella estudia en otro colegio cercano al nuestro, recuerdo odiarla por lo que hizo con Federico de repente se empezó acercar.

-Hola chicos que tal su día ¿cómo estuvo el colegio?- Dijo Ana claro hipócritamente con una asquerosa sonrisa de caballo, Mientras la miraba recordaba, cuando Federico venía a llorarme por todo lo que ella hacía, pues si el glorioso Federico que ironía ¿no?

-Hola Ana, que disgusto ¡¡verte!! Digo... qué lindo verte, pues bien un poco aburrido ver las mismas caras, casi todo igual nada interesante. - Le respondí con voz sarcástica y cortante mientras obserbava la mueca que formaba en sus finos labios rosa.

-bueno chicos no los interrumpiré más, me gustó verlos Adiós.- Ella se despidió con un guiñó.

 -¡Adiós!- dijo Federico al ver que ella ya se encontraba fuera del lugar.

-¿es enserio? Eso fue lo mejor que pudiste decir, "Adiós".-el muy tonto empezó a reír- hay pequeña me encanta ver tu cara enojada, Mejor comamos ¿sí?, Muero de hambre. - me dijo muy fresco, típico se escabulle de sus problemas.

 La mesera nos tomó la orden, Federico como siempre con sus coqueteos a esa ¨inocente chica¨.

Luego del restaurante y  una tarde bastante divertida celebrando por su  nuevo auto, Federico  me llevó a casa.

 Al llegar saludé con todos y fui a mi habitación necesitaba descansar de este largo día.

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Mientras despertaba ya saben la común frase que todos mencionan al amanecer, "un nuevo día". Pues para mí un puto día más.

 Al terminar de arreglarme baje, observe que todos ya habían comido por ende desayunaría sola, en el instante que preparaba mi cereal con leche recibí un mensaje de Federico el cual decía:

 "Pequeña ¿cómo amaneciste? En veinte minutos paso por ti, para ir al colegio¨

- ¡Enserio¡ Federico era tan impredecible no podía tardarme así que termine de desayunar.

Cuando salía de casa pude ver que Federico venía acompañado, al ver bien, vi que venía con una de sus repuestos, ella era sol la rubia candente como el la llamaba, la chica que él llamaba cuando Ana lo botaba.

 ¡Agh!

 Inmediatamente  subir  a su auto Salude con ellos fingiendo una enorme sonrisa y emoción. En camino al colegio Federico me dijo:

Dos o TresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora