Capitulo 4

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POV Rubius:

Le vi alejarse mientras se ponía roja como un tomate

-Ay Ruben que estas haciendo...

No sabia el como ni el porque estaba allí. Nadie me garantizaba que ella no fuera una de esas locas. Pero había algo en aquella muchacha que me inspiraba confianza. Sus ojos, sobre todo eran sus ojos.  Mire a mi alrededor. Era el típico piso de una estudiante independizada, había caos en la casa pero dentro de un orden.Como un cotilla me puse a revisar el salón y repare en algo que me llamo la atención. Encima de una mesita estaba bien colocada la ultima versión de play 3 y justo al lado algunos juegos que conocía: Battlefield, Halo, Bully e incluso el GTA 5.

-Valla, valla me encuentro ante una chica gamer-dije para mi

-¡Eh! ¿que haces fisgando en mis cosas?

Me di la vuelta y allí estaba ___ mirándome.

-Lo siento yo... no quería ser borde.

-¿Tu?, pero si era yo el que estaba cotilleando

-Si bueno da igual espera un momento que haga una llamada porque no tengo ropa de chico aquí y no creo que quieras ponerte unas de mis batas- encarno una ceja

-Ui siiii me encantaría-dije poniendo voz de pito y pegando saltitos

Ella soltó una carcajada

-Bueno pues entonces ahora vuelvo- se dio la vuelta y entro a lo que yo creía que era su cuarto

Me quede un rato mirándola sin que se diera cuenta. Había algo en esa chica que me intrigaba. Se notaba que era una chica con carácter y divertida por como me había tratado en algunos puntos de la conversación. Pero en cuanto se daba cuenta que estaba hablando conmigo, por así decirlo, se callaba. Ademas no entendía porque se disculpaba por todo. La observe mientras seguía hablando por teléfono y riendo. Tenia una risa bonita. Físicamente tampoco era una chica espectacular pero era una de esas chicas que se consideran bonitas. Tenia ojos azules claros y el pelo rubio le llegaba por la cintura. Se vestía de manera in formal pero era suficiente para ver que hacia ejercicio pues tenia unas piernas muy bonitas. Joder ¿porque estaba pensando yo en eso? es una chica mas, aunque sintiera curiosidad por ella. Su voz me saco de mis propios pensamientos

-Emmm esto...

-Llamame rubius

-¿Prefieres rubius a Rubén?

-Para llamarme por mi nombre antes hay que ganárselo- le sonreí ampliamente

-Mmmm- entre cerro los ojos- vale..."ya veré como lo hago"...-esto ultimo lo dijo bajito pero yo lo escuche y me hice el loco

-Y bien ¿voy a tener ropa? 

-Si un momento una vecina me va a dar ropa de su hijo, medís mas o menos lo mismo así que creo que te estará bien

-Perfecto

-¿Tienes hambre?

-La verdad es que con el día tan movidito que e tenido si

-Vale te preparo algo- se levanto

-¡Valla!¡ que suerte he tenido!

Ella se giro extrañada

-Bueno hago caer una chica al suelo y encima esta me da ayuda, me da cobijo y me da de cenar-me levante- creo que e tenido bastante suerte

-Bueno- se acercaba a mi- me gusta ayudar a la gente

-¿A si?- dije con tono juguetón- ¿no sera porque soy yo?

-No- cada vez no acercábamos mas el uno al otro- es mas, eres un desconocido y siempre se dice que no se debe hablar con desconocidos

-Pero tu me conoces- me puse frente a ella- ¿o no?

-Si, pero tu a mi no

-Ya- me acerque a su boca- pero eso puede cambiar

Nos acercamos el uno al otro y estábamos a punto de rozar nuestros labios cuando sonó el timbre de la puerta. Ella se separo de mi rápidamente y fue a abrir la puerta. Mierda ¿pero que haces? ahora la situación podría ponerse realmente incomoda. Ella volvió con unas cuantas prendas en la mano y cuando me vio bajo la mirada

-Te he preparado el cuarto de invitados, voy a dejarte la ropa allí y si quieres puedes ducharte- estaba rojas hasta las raíces del pelo

-Vale me duchare después de cenar

-Perfecto voy a preparar la cena

Cuando la cena estuvo lista nos sentamos en el salón y ella puso la tele. Comimos un rato en silencio. Era evidente que ella estaba en tensión seguramente por mi presencia así que decidí romper el hielo

-Buenooo mmm ¿cuantos años tienes?

-Diecinueve

-Aparentas mas

-Muchas gracias

Y otra vez de vuelta al silencio incomodo pero esta vez fue ella la que rompió el hielo

-¿Porque has decidido quedarte aquí?

-No se... no conozco mucho esta ciudad y como fuiste tan simpática conmigo decidí seguir mi instinto y quedarme

-Ammm- me miro a los ojos por primera vez- ¿tienes muchos amigos por aquí?

-Si, una muyayita- me miro extrañada- te conozco a ti

-Rió por lo bajo- no creo que quieras ser mi amigo

-¿Por que no? así conocería a alguien en mas sitios de España

-Lo dices enserio- me miro un poco ilusionada

-Si ademas, me conviene ser tu amigo voy a dormir en tu casa

Bajo la mirada y de repente soltó una pequeña lagrima

-¿Que te pasa?

-Nada es solo...-me miro con un dolor que me llego al corazón- yo no tengo amigos

-¿Por que?

-Es largo de contar...- por la expresión de su rostro supe que seria mejor no profundizar

-Eh- le toque la cara- pues ya tienes un amigo

-Me miro agradecida- gracias- y de golpe me dio un abrazo

En ese momento me jure que seria un amigo para ella e iba a hacer todo lo posible por verla sonreír. Se veía que necesitaba a alguien como yo y siendo sinceros, yo necesitaba a alguien como ella en mi vida.

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hola criaturitas!!! este capitulo esta enteramente contado por rubius y creo que hare algunos iguales

¿creeis que seran amigos?

votad y comentad pls :D

Un regalo inesperado (el Rubius y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora