Cuando ya no se puede esperar más

Capítulo 2: Errores

Capítulo 2:Errores.

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Porque su primer error fue creer en las personas que nunca las verían como realmente eran. Porque esas personas nunca podrían verlos. Porque estaban cegados.

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Dime, ¿cómo te sentirías si las personas que son tan importantes en tu vida... solo aman una parte tuya, que no te correspondan como quieres, que solo te utilicen?

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No hay peor sordo que el que no quiere oír. Ni hay peor ciego que el que no quiere ver.

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Marinette

¡Al fin! ¡Al fin se había declarado a la persona que amaba! ¡Tanto tiempo y al fin su sueño se hizo realidad! ¿Quién diría que todo acabaría así? ¡Y lo mejor de todo es que lo logró sin ser LadyBug!

... Esperen... ¿qué?

Así es, Marinette sabía que Chat Noir era Adrien, imagínense el infarto que casi tiene al enterarse. Sucedió hace algún tiempo, cuando terminaban de purificar a un akuma más...

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Hace algún tiempo

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LadyBug acababa de purificar el akuma que había poseído a un chico que rechazaron y humillaron en una audición de canto (¿que nadie tiene sentido común en esa ciudad? Es decir, si sé que alguien se puedo volver un villano con la más mínima emoción negativa que tenga, ¿no es lógico buscar una manera más sutil de decirle a alguien que no tiene talento?... Ups... creo que no debí comentar lo último), sin embargo, tanto ella como Chat estaban en su límite ya que solo tenían dos puntos...

Pip Pip

Olvídenlo... ya solo les quedaba uno...

Se despidieron como pudieron e inmediatamente salieron corriendo a un lugar seguro... un lugar seguro que casualmente quedó muy cerca uno del otro. Marinette fue la primera en salir y logró ver una luz verde saliendo de un callejón a dos cuadras de ella, supo entonces que se trataba de su compañero de batallas. Un compañero de batallas que lograba hacer que su corazón latiera fuertemente cuando lo veía. Porque Marinette era inocente, pero no tonta. Ella sabía que se había comenzado a enamorar de gato negro. Sin mencionar que había comenzado a encontrar parecidos el uno con el otro, pero desechó la idea pues creía que estaba siendo paranoica. Aun así, su principal problema era elegir a uno... ¿a uno? Si, pues todavía estaba enamorada de Adrien, y tenía que decidir entre él y el otro. Pero... ¿por quién?

Nuestra protagonista se escondió en el callejón de donde apenas salía, quería respetar la privacidad de su amigo, así que se tapó también lo ojos por si acaso. Aunque de nada sirvió pues escuchó su voz cuando habló con su kwami, una voz que reconoció a la perfección... la voz de Adrien.