Zayn entró a la casa de Harry sin tocar. Mientras silbaba una canción, el moreno entró a la cocina y sus silbidos se apagaron cuando vio a la pálida chica bailar. Se quedó boquiabierto mientras miraba el seductor movimiento que hacían sus caderas al moverse y al parecer, ella no había notado su presencia porque seguía bailando al ritmo de la música que provenía de la radio al mismo tiempo que cocinaba.
Zayn se aclaró la garganta para llamar su atención y ella al fin paró de bailar y se volteó.
-Oh, hola….- tratando de recordar su nombre, la ojiazul frunció el ceño.- ¿Zayn?
Él sonrió. -Hola, nena. ¿Bailas para mí?
Ella se sonrojó, pero aun así ignoró su comentario y siguió cocinando como si nada.
-¿Cómo entraste a la casa? Harry siempre le coloca seguro a la puerta y no te he escuchado entrar.
-Tengo una copia de las llaves de la casa.- Zayn se apoyó en el marco de la puerta y la observó. No pudo evitar fijarse en el atractivo trasero, y en lo estupendo que sería poder tocarlo. Si tan solo no fuera el mejor amigo de Harry….- hablando de el, ¿Sabes donde está?
-Salió hace un rato, dijo que volvería mas tarde.
-¿Qué estas cocinando?
-Un pastel para Harry.- sonrió sin dejar de revolver la cuchara de palo en el recipiente.- ¿Quieres probar un poco?
-Claro que si.- Dijo el moreno
-Toma.
Zayn caminó hacia ella. _____ cogió un poco de la masa con la cuchara para voltearse y llevarla directo a su boca. Como un niño obediente, el moreno entreabrió los labios y saboreó hasta el último rastro de la masa.
-Uhm… chocolate.- dijo él, mientras se relamía los labios.- está exquisito.
-Gracias, espero que a Harry le guste también.
Zayn la miró y fue ahí cuando tomó conciencia de lo cerca que estaban. Fácilmente podría inclinarse y besarle. Un pequeño rastro de chocolate posaba en la comisura de los labios de la chica, y la idea de quitárselo con los suyos era tentadora. Mientras la observaba, Zayn notó que sus ojos tomaron un brillo especial y por un momento creyó que era por él, pero luego llego a la razón de todo esto, ''Harry''. Ella estaba enamorada de él. Sólo había que oírla hablar del rizado y notar el brillo en sus ojos. Una ligera oleada de celos invadió a Zayn. Harry si que era un tipo con suerte.
-¿Interrumpo algo?- La voz de Harry lo sobresaltó. Girándose, encontró al rizado en la puerta con los brazos cruzados sobre su pecho mientras los miraba detenidamente. Los azules ojos de la chica se iluminaron al instante de verlo.
-¡Harold!- exclamó ella, sonriente y sin dudarlo se lanzó a sus brazos, tomándolo por el cuello y acariciando los pequeños rizos de su nuca.
Pero _____ se alejó de él al sentir que no le correspondía el abrazo. La cara de Harry se mantenía inexpresiva mientras la apartaba de él, rechazándola. La sonrisa en la cara de ella se borró, y el brillo en sus ojos desapareció.
-¿Pasa algo?- preguntó ella pero el la ignoró. En vez de responder, se dirigió hacia el moreno que yacía mirando.
-Zayn, sígueme. Necesito hablar contigo.
El moreno miró por última vez a _____ y encogiéndose de hombros, siguió a Harry por las escaleras.
-Fuiste muy grosero con ella.- dijo Zayn y Harry lo ignoró.
-¿Por qué le estabas coqueteando a mi chica?- Se podía notar una pizca de celos y decepción en su grave voz.
-No le estaba coqueteando.
