☆ Capítulo 4 ☆

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Ya estaba oscureciendo y no quedaba prácticamente nadie en el lugar, miré la hora: 10.00 p.m. No voy mal. Cogí mi móvil, apagué el ordenador y guardé en mi fichero toda la información que conseguí acerca de los Monroe y sus amistades.
Salí de allí y fui directa a mi casa, subí las escaleras y me duché para intentar relajarme un poquito...creo que una de las cosas que mas me relajan es sentir el agua recorriendo mi piel. Cuando salí de la ducha tras secarme el pelo, cogí mi ropa interior y rebusqué en mi armario para encontrar un vestido bonito (multimedia).
Bajé las escaleras tras estar lista y fui observada por un par de ojos sorprendidos.

-¿A donde vas?- pregunta mi padre

-¿A una fiesta? - respondo yo de manera obvia

- ¿Dónde?- dice Derek esta vez de manera sobreprotectora y le tendí el papel con la dirección de la casa- Genial, se donde queda- le miré extrañada- ¿Qué? - me preguntó

- Nada, nada - dije restándole importancia- ¿Vas a estar vigilándome?-le pregunté a Derek

- Posiblemente- dijo sonriendo de lado a lo que yo rodé los ojos.

- Perfecto...pues me marcho- digo revisando mis cosas en la pequeña cartera que llevo- Chao- me despedí y por una vez que mi padre tenía allí su coche...¿por qué no cogerlo? No creo que se entere. Sonreí y me dirigí a ese precioso coche, lo abrí ya que habia unas llaves de repuesto, bien escondidas, en el garage y subí en el, arranqué y me dirigí a la fiesta.

[...]

Aparqué delante de una casa con un jardín delantero precioso exceptuando la presencia de borrachos y gente prácticamente desnuda.
Entré y al ver el interior de la casa era peor todavía...dios...¿vendría Sophia?
Recibí varias miradas: unas de asco por parte de las chicas "populares" a las que respondí con una sonrisa falsa y unas por parte de los chicos que bueno no me miraban a la cara precisamente...gilipollas...

Me dirigí como pude hacia la cocina con la intención de contactar con Sophia, no me había dado su número...pero trabajando donde trabajo no es complicado conseguirlo, y de conseguir una copa.
Entré en ella y vi una melena morena ligeramente ondulada, cuando la chica se giró vi a una Sophia muy mona con un vestido simple pero adorable, le sonreí.

-Viniste- dije mirándola

-Por supuesto, no te iba a dejar sola- rió

-Estás muy mona, ¿por qué no vas así al insti?

-¿En vestido?- levantó una ceja

-No- rodé los ojos- me refiero a ir con ropa así- la señalé- super adorable y que te quede como un guante - le guiñé un ojo.

-No se- dijo encogiéndose de hombros sonriendo- supongo que no me gusta llamar mucho la atención

-Eso ya se ve- dije sonriendo de lado- No vas a cambiar de look, sería demasiado cliché y además...sería cambiarte a ti, te quiero dar un consej- alguien me interrumpió empujándome ligeramente hacia delante

-Perdona- miré hacia atrás y vi a un chico con la cabeza gacha

-No pasa nada- le respondí, cuando levantó la cabeza me sorprendí. ¿Blake? Obviamente es su apellido pero no se su nombre- ¿Blake?

-Hola Chloé, por cierto me llamo William - me sonrió y le miré extrañada- ¿Qué pasa?

-No nada que pensé que eras de los chicos...groseros e imbéciles que miran a las tías como si fueran carne fresca para una noche- dije mirandolo a los ojos

¿Nerd? ¿Yo? NoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora