¿Amigos?

Capítulo 12

La verdad es que tía Flaw tenía razón, el lugar es precioso, tiene una casa frente a la playa, una casa enorme y hermosa, algo rústica. Por un lado estoy más que contenta al estar aquí, por el otro extraño a Ethan, hemos hablado por video llamadas pero lo noto distante, tal vez mi forma de ser con el cuando tenía que estudiar lo enojó y ahora se está desquitando, no lo se, pero varias ideas pasan por mi cabeza, y no son ideas de que se pasa sólo, viendo Harry Potter en su cuarto, son ideas que atormenta. mi mente todas las noches.

- Mi amor.. - saludo con una sonrisa a la camara que tengo en frente.

- Kate, lo siento cariño hoy no puedo, estoy algo ocupado,¿te parece si hablamos mañana?

No pasa desapercibido para mi que no lleva camiseta, tranquila Kate, los chicos no usan camiseta cuando hace calor.

- ¿Si? - pregunta.

No le respondo y apago la cámara.

Mis ojos arden y varias lágrimas mojan mis mejillas.

- ¿Qué sucede Theri?. - pregunta Lili, mi prima con preocupación.

- Ethan se ha portado muy distante. - suspiro - Cuando hice la video llamada creo que lo cogió por sorpresa - respiro hondo para calmarme - Estaba sin camiseta y muy apurado, y creo que oí pasos de alguien.

- Insinuas... ¿Que te engaña?

Asiento porque la idea de mencionarlo me lástima el corazón.

- Oye Theri, no te pongas así - se acerca me da un abrazo y yo hundo mi cabeza en su cuello y empiezo a sollozar. - Soy consiente de que todos los hombres no son putos, pero ninguna persona vale una lágrima tuya, aquí en Brasil hay muchos chicos guapos, en todo el mundo hay chicos, hay demasiados culitos esparcidos por aquí y por allá, eres guapa y carismática, puedes conseguir a cualquiera, es más de hecho mi amigo Frank babea por ti.

- ¿Frank? ¿El tipo guapo con piel bronceada y cabello rubio?. - pregunto anonadada.

- El mismo...

Río, el es demasiado guapo como para fijarse en mi, aquí en Brasil existen mujeres con demasiadas curvas, yo no tengo tanto.

La verdad es que el chico si me gusta pero renuncie a aceptar cualquier sentimiento hacia el porque yo amo a Ethan, la verdad aún no estoy segura de eso así que mejor esperemos.

El cuarto de Beth [Lilibeth] es espacioso y hermoso, me gusta que las lámparas no iluminen mucho y me encanta esa hermosa y grande ventana que da a un cielo estrellado.

Antes de dormir, no puedo dejar de pensar en el, esto esta consumiendo mi interior, yo confiaba en el, se que estoy dando especulaciones precipitadas pero se lo que escuche, y se que su mamá en la noche no va a su cuarto. No duermo nada, la verdad estaba pasando bien estas dos semanas pero desde lo sucedido hay veces en las que se me va el apetito y lloro en las noches, Ethan no me llama.
Se ve lo mucho que le importo.

Hay un momento en el que ya no puedes más y es mejor verlo por tus propios ojos para aceptar la realidad, le explicó a tía Flaw que apenas vea lo que tengo que ver tomo el primer avión de regreso, me sonríe con tristeza y acepta.

El viaje es mas largo de lo que recordaba, tal vez es porque estoy ansiosa, pasa lo que parece una eternidad y llegamos, es por la noche, me bajo del avión, y tomó el primer taxi que encuentro desocupado, le digo la dirección y conduce, llegó y tomó una llave que tiene escondida debajo del tapete de Bienvenido, entró haciendo demasiado silencio y caminando en puntillas, me dirijo a su cuarto y me asomó por la puerta entreabierta, veo a dos personas juntas, una chica esta saltando en el regazo de Ethan.

Empiezo a llorar, quiero gritar y desahogarme pero no puedo, no quiero armar un escándalo.

Voy a casa y pasó la noche llorando ahí, a la mañana siguiente salgo para ir al aeropuerto, mi mamá sigue en su viaje de trabajo, por lo qu me marcho sola. Salgo de mi casa con los ojos hinchados y el alma en el suelo.

- ¡Hey amor! ¿Que haces aquí? - pregunta Ethan, no me había percatado de su presencia.

- No quiero volver a verte en mi vida Ethan, nunca más ¿me oiste?

- ¿Pero que sucede, princesa?. - pregunta fingiendo inocencia

- Te vi ayer, una chica montada en tu regazo, alejarte, no quiero hablar.

Ethan se pone tenso.

- Puedo explicarte...

- ¡No necesito más mentiras! ¡Yo te vi!

Lo empujó y paro un taxi que por suerte pasa.

Se acabó, el era uno más del montón, pero que ilusa fui, antes lo veía traer diferentes carnadas a su habitación, ¿Por que no me acordé de eso antes de enamorarme?

Mi conclusión es que el amor nos ciega, no nos permite ver más allá de todo lo bueno de nuestra pareja o del chico que nos gusta.

Fui una ilusa.