Costumbres Romaní

Nuevo hogar

La larga carretera y la lluvia golpeaba fuera del camión caravana, un trailes de hogar transportando pescado, o cualquier cosa teniendo a cuestas esa insignificante caravana nada parecido a su hogar, ni siquiera parecida a su habitación, aquí no había más que peste y trabajo el padre de Luhan era amable, pero le hacía trabajar como si la vida se le fuera en ello ya no sabía si por petición de Lulú o por la de su padre, no alcanzaba a entender mucho, como había cambiado su vida, una noche estaba cenando, yendo de fiesta en parís una vida glamorosa y al otro conduciendo un mugroso tráiler que cargaba pescado, muebles o cualquier estupidez, por suerte esta vez solo llevaban afelpados pero de igual forma era horripilante y aterrador, sus dedos ya tenían yagas, se sentía cansado y todo era peligroso, además Luhan ya no era el mismo pasaba sus horas metido en la caravana, o en la cafetería cuando no lo acompañaba en los viajes, ya no era el mismo inocente de hacia un tiempo, no se dejaba tocar, ni se dejaba abrazar, claro no lo hacía evidente pero él lo notaba, y aquí estaban en mitad de la carretera.

-Luhan que te sucede

Preguntaba el alto, después de ocho horas manejando regresaban a casa y Luhan jalaba la oreja de su ciervo de felpa, al final el dueño del pedido había visto a lulú y le había dicho que tomara un afelpado, era difícil pensar que niños como él eran forzados por las tradiciones a casarse es decir, siquiera podría dar a luz de forma correcta a un bebe con esa edad, Luhan miro al traidor y solo se limitó a continuar.

-A mi nada Sehun

-Por qué me llamas así

Había clara tensión Luhannie nunca hablaba tan serio, era más grave de lo que imaginaba, el rubio agito el pequeño ciervo de peluche y apretó los dientes, si Sehun creía que lo haría fácil estaba equivocado, él era el traidor, eso era difícil de olvidar, y por mucho que en la última semana, Sehun lo hubiese intentado, él simplemente se sentía asqueado de que lo tocara, más allá de lo fraternal.

-Que...

-Sehun nunca me dices así, me dices Hunnie

El enorme tráiler se estaciono y Luhan dejo de mantener ese silencio incomodo que se había formado

-Ah... bueno sí, pues descubrí que es tonto ponerte apodos solo es eso

El rubio hasta había tartamudeado con esa simple frase mientras Sehun levantaba su mirada dejando de escapar una clase de puchero

-Pero a mí me gus...

Fue en ese mísero segundo que lulú sintió sus piernas adormecidas, debía salir de ahí antes de soltarle lo mucho que necesitaba ser amado, que aunque lo hubiera declarado humillado seguían siendo esposos, pero su ahora orgullo creciente se lo impedía, así que apresuro sus labios rápidamente

-Quieres desayunar un tanto solo, yo... tengo que irme que tonto lo había olvidado, Omma me pidió ayudarle nos vemos Sehun

Luhan salió escopetado huyendo, que más podía hacer esperar que Sehun se explicara, que le dijera más, entonces recordó brevemente, a quien engañaba necesitaba alejarse del mundo lujoso o terminaría enamorándose de alguien que, si lo estimara como debía.

Flash Back

-Entonces puedes regresar solo a casa Hannie

-Claro que puedo mírame...

-Lo hago pequeño créeme que realmente lo hago