Me rindo... Nuevo amor - Marichat [Wattys 2016]

¿Ahora si le gusto? Vamos...

Marinette pov

Me apresuré a rechazar su propuesta intentando ser lo mas natural posible. Mentiría si digo que no tartamudee ni un poco, pero me siento orgullosa de no haberme sobrepasado con este problema. Mi lengua se portó bastante bien esta vez y funcionó... decente. Se entendía lo que decía lo que, para estar en una situación como esta, ya era mucho pedir.

Alya fue la que mas sorprendida estaba, y ¿Cómo culparla? Yo, antes, como ya mencione, hubiera muerto ante esta escena, pero ahora...

Un segundo, se me prendieron los focos. Adrien jamás me había ofrecido algo así, se estaba portando demasiado amable conmigo ¿Será que le gusto?... nah, ni yo tengo tanta mala suerte.

-Llegaré mas rápido, no hace falta que vengas

Me excusé y preparé para marcharme con la cuartada perfecta.

-Pero podría ser preligroso, ya sabes, con todos esos akumas por ahí...

Pestañé un par de veces antes de caer en la cuenta de lo que estaba pasando. ¿Acaso Adrien estaba insistiendo? No digo que sea raro que insista hablando generalmente de la palabra, pero no entiendo por qué hacía tal cosa. Es decir, nunca me ví en una situación asi. Y de haber estado se que no hubiera pasado nada simila. Y no me refiero solo al hecho de que yo hubiera aceptado con toda la emoción del mundo, no, me refiero a que si lo hubiera rechazado él solo aceptaría y se iría con Nino y Alya. Estoy verdaderamente confundida.

-Tampoco es que podrías hacer mucho ante los akumas...

En cambio, aunque el no lo sabía, yo si. Podía hacer y mucho. No solo combatirlos si no purificarlos, pero era tierno de su parte querer intentar protegerme.

-Es mejor a que vayas sola

Si bien tenía un punto yo no iba a ceder, necesitaba ir sola a mi casa, no podía dejar que Adrien viera como le escribía una carta a Chat Noir avisandole que no estaría en casa.

Ahora también me cuestiono el por qué debo darle explkicaciones a Chat Noir. No es mi novio, es mi amigo. No tengo por qué darle explicaciones a nadie, pero supongo que sería un lindo gesto para que, al menos, no se preocupe. Tampoco está bien jugar con el tiempo de la gente, quizá si tuviera el número de su casa...

-En realidad solo estoy poniendo excusas...

-No me digas

Me interrumpió Alya en su típico tono humorista-buarlón. Le dí una mirada desafiante que, obviamente, no tomó en serio y volví mi vista hacia Adrien.

-La verdad es que quería caminar un rato sola, ¿no te molesta?

Ser directa pareció funcionar pues en su cara se veía la decepción y la rendición. Quién lo diría... De cierta forma retorcida, yo, Marinette Dupaing-Cheng, estaba rechazando al que una vez me rechazó a mi; Adrien Agreste. Ni mas ni menos que el modelo mas deseado de todo Paris, al menos bajo mi juicio de ex-enamorada.

-De acuerdo...

-Nos vemos en lo de Adrien, no llegues tarde, Marinette

Alya me señalò de manera acusante. Yo reí y deposité mis manos en la espalda en modo inocente.

-¿Tarde? ¿Yo? ¿Con quién crees que hablas?

Bianca-.