Brotherly

Capítulo 24 - No Quería Parar.

Empecé a llorar en una esquina de mi cuarto, la imagen de Javier con otra no se me iba de la mente, quería ir donde estaba la choni esa y meterle un par de ostias. Cuando me fui calmando se me ocurrió una idea para que todos se fueran, no quería tener a nadie allí aunque tuviese que aguantarle. Bajé las escaleras y me subí a la mesa donde Lucas había hablado tan bien de mi.

- ¡Atención! Nuestros padres están viniendo para aquí. - grité.

- ¡Fuera todos! ¡Iros ya! - dijo Javi echándoles a todos. - Mierda, mierda, mierda. -

- ¿Me quedo y os ayudo a recoger? - nos dijo Lucas.

- No hace falta, lo hacemos nosotros. - le contestó Javi. Me dio un beso y se marcho, luego la chica que estaba con Javi se despidió de él. Que asco. - Hay que recoger esto rápido. -

Cuando todo el mundo salió Javi se puso como loco a recoger todo y yo me fui arriba, él me agarro de un brazo.

- Ayúdame Laura, porfavor. - me suplicó.

- No van a venir. -

- ¿Cómo? -

- Era un engaño, acaban de aterrizar ahora en New York. Puedes recoger tú solo. - mi voz sonaba decaída y triste.

- ¿Me estás vacilando niñata? ¿Tú sabes lo que me ha costado traer a todos aquí? Eres tonta niña. - me dijo alejándose de mi y gritándome.

- A mi no faltes el respeto, yo no te mandé hacer esa estúpida fiesta. - dije acercándome.

- ¿Pero tú de que vas? Que eres una niñata. -

- Eres una poca mierda, malcriado, asqueroso, asco que me das asco. -

- Niñata estúpida me estás tocando ya mucho los huevos. - no había separación entre nuestros labios, nos besamos, muy apasionadamente, con mucha lujuria y muy rápido. Agarró mi mejilla con su mano izquierda y la otra la bajó a mis caderas, las mías estaban debajo de su camiseta y acariciando su espalda, su mano se soltó de mi cara y bajó hasta mi pierna que la hizo impulsar dejándome agarrada en su cintura. Nos seguíamos besando sin parar, no quería parar, nuestras respiraciones se empezaron a entrecortar. Mi móvil situado justo al lado nuestra se iluminó y el número y cara de Lucas aparecieron en la pantalla. Nos quedamos mirándonos y me bajó de él. Contesté el teléfono. Su cara era de resignación y me decía con su mirada que quería más. Cuándo colgué volví a oír la voz del Javi que me gustaba.

- Es muy tarde, dormimos y mañana recogemos, ¿te parece? -

- Sí, buenas noches. -

- Buenas noches. - subió al segundo piso y escuche como cerraba su puerta.

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A la mañana siguiente nos despertamos casi a la par, desayunamos juntos sin casi hablarnos y empezamos a recoger. Estaba amaneciendo y esa bonita luz envolvía toda la casa. Empezamos a hablar de todo un poco. Una de las canciones que más me gustaban era Faded de Alan Walker que era su canción favorita, la puso y la empezamos a tararear, después de eso la cantamos. Yo me puse a bailar y Javi me tiraba confeti, nos reíamos. Me encantaba su sonrisa. Así pasamos toda la mañana: hablando, riéndo, bailando... El tiempo se me pasó rapidísimo, con él eso siempre pasaba, tanto que no me di cuénta de que había quedado con Lucas. Sonó el timbre y paramos la música. Entró Lucas muy enfadado.

- Laura habíamos quedado hoy. -

- Lo se, los siento, teníamos que limpiar todo esto y... -

- ¿Toda la tarde? - vi el reloj y marcaba las cuatro y media. Lucas se fue muy cabreado, Javi fue detrás de él. No quería saber nada más, solo quería seguir con Javi, que el tiempo se parese para siempre y estar bailando a su lado eternamente.