Era 22 de diciembre y nuestros padres habían organizado unas vacaciones a Dinamarca por el cumpleaños de Javi. Estaba muy contenta, nunca había salido de España y necesitaba desconectar. Estaba en el avión al lado de mi madre y de Javi, tampoco había viajado en avión y estaba un poco nerviosa.
- Esto es muy fácil: cierras los ojos y piensas que estas... En una noria por ejemplo. - Javi me tranquiliza.
- En una montaña rusa. - le sonrío y agarra mi mano. Mañana cumplía 19 años y tenía un regalo especial para él: un pequeño medallón en forma de corazón, dentro tenía una foto de nosotros.
Era todo perfecto, él, yo, la nieve. Aterrizamos y al salir de allí pensaba que caía redonda al frío suelo. También venían Isabel y Ana con nosotros, y no veía especialmente contenta a mi madre, sabía que le incomodaba la presencia de Isa pero yo no puedo negar que esa mujer me caía especialmente bien. Llegamos al hotel, había cuatro habitaciones a nombre de Marcos: la de él y mi madre, otra para Isa y Ana, la tercera de Javi y la cuarta, pegada a la suya para mi. Nos fuimos a cenar al salón principal y a organizar lo que haríamos esta semana.- Yo quiero ir a los jardines de Tívoli. - sugierió Isa.
- Pues a mi me parece más interesante el Castillo de Rosenborg. - discutía mi madre.
- Podemos ir a los dos sitios, vosotros chicos ¿Qué os apetece? -
- ¡Parque de atracciones! - grito Ana.
- Si, podemos ir. - dijo Javi. - Mejor aun... Ana, yo y Lau vamos a Tívoli y vosotros vais al Castillo ese. -
- A mi me parece bien. - dice Marcos satisfecho. - ¿Qué dices cariño? -
- Sí, está bien. - dice molesta. Nos levantamos y vamos cada uno a nuestro cuarto. Cuando compruebo que todos estám en sus habitaciones dormidos voy al cuarto de Javi.
- Sabía que vendrías. - nos besamos. - Por fin podemos dormir juntos. - me acaricia.
- No. -
- ¿No? -
- Puede entrar cualquiera, no quiero arriesgarme a que nos pillen. - asiente resignado. - Pero podemos estar un ratito juntos. -
- Un ratito. -
- Chiquitito. - nos reímos y empezamos a besarnos apasionademente mientras me tira a la cama deshecha. Quito mi jerséy y el su sudadera. Nos giramos y me quedo encima suya besándo su torso desnudo, él baja sus pantalones y deshabrocha mi sujetador haciendole colgar en la cabecera de la cama, nos reímos y me desvisto por completo. Hace lo mismo y hacemos el amor, él agarra mi cabello, se pone a mi altura y me besa el cuello, con su mano libre agarra mi cadera y hace aumentar el ritmo. Nuestras respiraciones se aceleran e intento no gritar, cosa que gracias a él e podido aguantar. Acabamos como siempre, riéndonos el uno al lado del otro, no me doy cuenta y son las cuatro de la mañana, con él el tiempo vuela.
- Es hora de irme. -
- Vale. - me visto y nos besamos por última vez al lado de la puerta.
--------------------------------------
Me levanto despues de dormir tan solo cinco horas y visto un vestido de tela gruesa color gris jaspeado, unas medias negras y mis botas verde militar. Voy al buffet desayuno del hotel y cojo unas tosatadas con mantequilla, un zumo y un café bien cargado, me siento con todos y me río al ver que Javi también tiene en su bandeja un café casi manchado. Cojemos un autobus y nos dirigimos a Tívoli. Allí nos dispersams y hacemos lo que acordamos ayer. Ana estaba emocionada, se compró un algodón de azúcar y se montó en todas las atracciones, y nosotros con ella. Por un momento creía que volvía a tener doce años. Javi y yo aprovechabamos cualquier momento para agarrarnos y acariciarnos. Volvimos al hotel todos juntos. Mi madre parecía enfadada. Nos fuimos a nuestras habitaciones, cuando estaba lista para dormir alguien tocó mi puerta. Abrí, era Javi.
- ¿Qué haces? -
- Quiero aprovechar cada segundo que pueda estar a tu lado. Y hoy lo voy a hacer. - sonreímos y me beso. Hoy sí, hoy dormimos juntos, abrazados y felices.
ESTÁS LEYENDO
Brotherly
RomanceBrotherly cuénta la historia de Laura y Javier, dos personas obligadas a vivir bajo el mismo techo. Madre de ella y padre de él unidos por una bonita relación sentimental y varia gente de por medio impedirán el idíleo entre ellos. Pero, ¿Qué línea e...