Diecinueve.
Justin se levanto con pereza. No había podido conciliar el sueño, nuevamente. Llevaba días asi.
Quería dormir todo el día para así no verle la cara a Ryan y a _________. Pero no podía.
Se ducho & se vistió para luego bajar a la cocina donde estaban Christian y Marian.
- Buenos días – dijeron al unísono.
- No veo que tienen de bueno… -susurró.
Fue hasta la nevera y saco un bidón de leche. Saco un vaso y se sirvió en este.
- ¿Te sientes bien, Justin? – me pregunto Marian.
- Si.
- ¡Tienes unas ojeras!
- No eh podido dormir es todo – le sonrió– Uhm, ¿Y los otros?
- Julia y Chaz duermen, Louis y Anne, _______ y Ryan también. Y pues el pequeño monstruo esta atrás tuyo – dijo Christian
Se giro y vio a la pequeña sobarse los ojos con los puños.
Tenía los rizos revueltos y el pijama que le había regalado Chaz le llegaba hasta el piso.
Sonrió & la tomo en brazos para sentarse con ella.
- ¿Por qué no estas durmiendo hermosa?
- Te hecho de menos –dijo con esa voz suya que cada día se le hacia más tierna a Justin.
Christian y a Marian exclamaron un “Aaaw” & Justin rio y beso la mejilla de la niña.
- ¿Quieres algo enana? – pregunto Christian.
- ¡Galletas!
Christian saco del estante un paquete de Oreos y se las entrego a Sophie sin antes dejarse unas para el.
- ¡Christian! –dijo Marian, riendo.
- ¿Qué?
- Para ya de comer, te vas a poner gordito.
- No importa, aún así me vas a querer.
El rubio se acerco a ella y la atrajo hacia el para besarle.
Justin se sintió incomodo, por lo que se levanto junto a Sophie y se fue al living.
Se recostó en el sillón y prendió la tele.
Comenzó a pasar los canales y en uno estaban dando una de esas películas para niñas.
- ¡Ahí papi! - Sophie grito emocionada.
Justin suspiro y dejo el canal. De todos modos no tenia intenciones de ver.
Sophie se acorruco en el pecho de su padre y comenzó a ver la película mientras Justin le acariciaba el cabello.
Al rato después sintió unos pasos en la escalera. Giro la cabeza y vio a Louis. El se tiro al lado de Justin.
- ¿Ahora te gustan las princesitas, Justin? – dijo Louis, riendo.
- No estoy para bromas, Louis.
- Ya, ya. Lo siento.
- No importa.
- Hace días estas así, ¿pasa algo?
- No…
- Venga, sabes que puedes decirme lo que quieras.