Veintisiete.
Eran casi las diez cuando un hombre de bata blanca salió por uno de los pasillos. Su familia y yo nos levantamos rápidamente, mientras los otros seguían en los sillones. _______ con Sophie el los brazos, Louis, Christian y Chaz dormían al igual las chicas.
-Ryan no esta nada bien, puede salir de esta pero es dificil . Lo siento – el doctor torció el labio - ¿Quieren pasar a verlo?
Su madre negó con la cabeza, al igual que sus hermanas y su padre.
-¿Puedo entrar yo? – pregunté y su madre asintió.
El doctor me guio hacia la habitación y allí, me dejo a solas.
Ryan estaba en una camilla, con los ojos cerrados. Tenía el rostro con cortes, los brazos también.
A los pies de la cama estaban sus cosas.
Tome una silla y me senté a su lado y me dedique a observarlo. Dirigí mi mirada a sus pertenencias y de su chaqueta salía un sobre. Estire mi brazo y la tome. No se si estaba bien abrirla, pero lo hice y comencé a leer.
“Para _______.
Lo se todo, los chicos me han contado la noche que te haz ido con Justin. Eh estado fingiendo todo este tiempo que no se nada, al igual que tu me haz estado engañando. En fin, me voy de vuelta a Nueva York.
Si, tengo rabia pero son mis mejores amigos, jamás les guardaría rencor, a ni uno de ustedes.
Ah, cuida a Sophie por que me daré una vuelta por Londres el otro año.
Te quiere, Ryan.”
Mis ojos se llenaron de lágrimas. Me guarde la carta en el bolsillo y me volví hacia Ryan, aun llorando. Entonces mire su pecho y era como si ya no respirara.
Me puse nervioso cuando la maquina comenzó a sonar, todo estaba pasando tan rapido. Él mismo doctor que me guio hasta ahí entro azotando la puerta y luego salió al pasillo pidiendo ayuda.
¿Y para que?, si Ryan, mi mejor amigo, ya se había ido…
*SE MURIO? OMG