Compatibilidad zodiacal || KUROKO NO BASKET ||

01.

•Compatibilidad.

Midorima fue a tomar una pequeña ducha, y luego, con una toalla rodeando su cintura fue a los casilleros a cambiarse de ropa. Había sido un entrenamiento muy duro. Su atención fue dirigida a la carta que cayó al abrir el casillero. Takao, que llegó justo en ese instante no pudo evitar reírse de la situación.

—¡Parece que Shin-chan tiene una admiradora!—dijo con un tono divertido. El peli-verde apartó la mirada y acomodaba sus anteojos.

—No digas tonterías Takao.

Pero eso no lo detuvo. Mientras se vestían las burlas recaían sobre el chico de lentes, además Takao, y el equipo en general, intentaba leer la famosa carta.

El sobre de la carta no dejaba ninguna pista sobre la autora.

Cuando estuvo vestido, ordenó sus pertenencias y busco un lugar apartado para leer la carta –entrada del establecimiento–, mientras Takao lo esperaba. La abrió con cuidado, pudo apreciar que el color de la hoja era verde, al igual que el sobre.

"Midorima Shintarō:

No soy muy buena haciendo este tipo de detalles pero de verdad necesito decirte que tú me gustas. Puede sonar extraño, lo sé, porque nos conocemos este año, pero puedo asegurar que mis sentimientos son reales.

Espero tu respuesta, tú elige el lugar.

PD: Me esforcé haciendo la carta, estas cosas no son lo mío.

Atentamente, Matsu Emi".

El chico solo suspiro, no se imaginó que ella se declararía de un medio indirecto con palabras tan directas.

«Oha-asa...», pensó buscando ayuda.

(...)

Noriko caminaba al lado de su nerviosa amiga Emi, era un día de lluvia así que ambas compartían un paraguas para ir a la escuela.

—Yoshida—le llamo la atención.— ¿Crees que Midorima-kun acepte mis sentimientos?—dijo la rubia, con sus ojos celestes expectantes.

La peli-naranja rodeo los ojos, toda la semana hablaba sobre su posible declaración y ayer ella le encargo que pusiera la carta en el casillero de él.

—No lo sé. Él es un tsundere, por lo que es muy difícil saber su reacción.

—Yo tengo la esperanza de que acepte y seamos novios— dijo entrelazando ambas manos mientras varios corazones rodeaba su figura. Imaginaba todas las cosas que los novios hacen, pero imposibles para un tsundere como Midorima.

—Él no es ese tipo de chico. No te hagas ilusiones— le recomendó mientras apretaba el paraguas y lo acomodaba de manera justa para las dos.

Llegaron al instituto justo a tiempo, entraron a su respectivo salón ya que iban en clases distintas. Noriko se encontró a Midorima y Takao en sus puestos y este último molestaba a su compañero con un lápiz el la mejilla.

—Es un poco temprano para las demostraciones de amor—dijo la chica cuando llegó a su puesto que se ubicaba a la izquierda del peli-verde. Takao se sentaba adelante de él.

—¡Nori-chan!—la llamo alegre— ¡Shin-chan tiene una enamorada!

La chica rió por lo que dijo y también por la notable molestia de Midorima.

—¿Celoso?—dijo mirándolo con una ceja alzada. Sus bromas han ido aumentando al mismo tiempo que ellos se acercan más como "amigos". Midorima se acomodó los lentes y miro a la peli-naranja.

—¿Puedes decirle a Matsu-senpai si nos podríamos ver en el descanso del almuerzo en la azotea?— pregunto el chico.

—Uhm...— se removió incómoda en su asiento, no esperaba que respondiera tan rápido a la confesión—. Claro.

(...)

Cuando la rubia supo el recado, sus ilusiones pasaron del ochenta por ciento al ciento diez por ciento. Espero con entusiasmo la hora acordada y él ya se encontraba ahí, con su lucky item –oso de peluche– en una de sus manos. Matsu Emi sonrío ante la escena.

La lluvia había dejado de caer y el frío era demasiado por lo que las mejillas de la rubia estaban más sonrojadas de lo que deberían estar.

—Ya llegué Midorima-kun— dijo intentando actuar normal y ocultando una parte de su rostro en la bufanda.

—Matsu-senpai—la llamo respetuosamente. Sí, Matsu Emi era un año mayor que el peli-verde.

El chico rebusco en uno de sus bolsillos y saco la carta, tendiéndosela a la rubia.

Su expresión se desfiguró completamente.

—¿Qué?— fue lo único que logró articular.

—Lo siento, no puedo corresponder sus sentimientos.

Hizo una reverencia, la carta se encuentra a en las manos de su escritora, quien la arrugo. Él se disponía a irse, pero fue detenido.

—¿Por qué?— rió nerviosa con un tic en el ojo.

—Nuestros signos zodiacales no son compatibles, nanodayo.

Esa excusa no dejó solo a Matsu con la boca abierta, si no, que escondidos detrás de un basurero escuchando toda la conversación –hace un rato devoraban sus almuerzos como palomitas de maíz– se encontraban Noriko y Takao con la misma expresión.

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N/A: ¡primer capítulo! ¡Espero que les guste esta nueva historia con Midorima!

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