Llamada
Lauren buscaba el contacto de _____ en su móvil con las manos temblorosas. Finalmente, cuando vio el contacto que de nombre llevaba "Maa girl 💖" le dio un pequeño ataque de pánico. ¿Qué le diría? ¿Qué razón le daría? Y más importante, ¿con qué fuerzas lo haría? Realmente le quería demasiado y ella la hacía feliz, pero su sueño, el cual había deseado desde pequeña, estaba por medio. No podía darse el lujo de perder algo que había deseado con todas sus fuerzas.
Cerró los ojos y suspiró para presionar el número. Primer pitido... segundo pitido... tercer pitido...
—Amor, ¿cómo estás? —respondió con emoción.
—Te amo
—También te amo, bebé. Pero, ¿a qué viene eso? —preguntó con curiosidad.
—Tengo que decirte algo, y espero lo comprendas.—Lauren, me estás asustando. —eso hizo que Lauren cerrara sus ojos ya cristalizados y sonriera con tristeza.
—Yo eh... t-te amé demasiado, no lo niego, lo sigo haciendo pero no igual que antes, yo diría que mucho más. Me encantaría ser tuya para siempre, pero tu y yo no podemos continuar juntas.
—Es una broma, ¿no? — _____ podía escuchar claramente los latidos de su corazón.
—Haz cambiado, creo que no tienes claros tus sentimientos como yo hacía ti, por eso... —fue interrumpida:
—¿Por qué tienes que crear una mentira para terminar conmigo? Porque es bastante obvio que mis sentimientos hacia ti están completamente claros. —sollozó.
—N-no llores —susurró con agonía en cada sílaba que pronunciaba.
Ella rió, seguido por un pequeño sonido de hipo. —No, no lloraré, porque ahora mismo estoy que me meo por la gracia que me causa esto. —dijo con ironía.
—Yo... no soy la persona correcta para que te enamores.
Permanecieron en silencio por unos minutos, así escuchando sus propios sollozos.
—Ya es demasiado tarde para eso.
Lauren cerró los ojos con fuerza.
—Lo siento. —susurró Lauren.
_____ asintió y apretó el teléfono.
—Está bien, Lauren. Si es lo que quieres, lo comprenderé. —fue su respuesta susurrada. Ella rió, pero nuevamente sonó como un hipo sollozante. —Te amo, Lauren. —y sin esperar contestación, colgó.
Una vez la llamada finalizada, _____, a solas en el pasillo, se apoyó contra la pared y se deslizó hasta quedar recostada en el suelo. Tenía la manos cerradas en puños sobre la fina tela de su camisa. Reposó su cabeza sobre el frío suelo y apretó los ojos mientras intentaba respirar con normalidad por nariz y boca.
Aguardó a que los sacudones mermaran, a que los temblores se apartaran de su cuerpo, a que el dolor dentro de su cabeza se volviera en un rugido apagado. Intentaba llevar el aire a la hueca cavidad de su pecho e intentaba bloquear todo, en vano.
El teléfono sonó y con lentitud tomó el auricular diciendo un "hola" casi imperceptible y distanciado.
—Soy yo, Dinah. ¿Eres tú?
—No, claro que no. Soy Beyonce.
—No te reconocí la voz. ¿Estás llorando?
—¿Por qué diablos debería de hacerlo? —respondió secamente.
—Wow chica, ¿qué pasó? —en sus palabras desbordaba la preocupación.
_____ se sentó derecha recostándose contra la fría pared para darle más peso a sus palabras.
—No lo sé, Lauren me llamó diciendo que me amaba pero debíamos terminar. —respondió masajeando su sien.
—¿Bromeas?
—Me has oído llorando, ¿crees que bromeo?
—Ay cariño, ¿quieres que vaya a tu casa? —_____ asintió como si ella pudiera verla.
—Diablos sí, necesito tus abrazos y un gran bowl de helado de chocolate.
Dinah sonrió con tristeza y rápidamente habló:
—Mis abrazos y tu bowl de helado gigante llegarán enseguida, te amo.
_____ respondió un "yo también" y nuevamente se deslizó hacia bajo.
* * * * * * * * * * * * * *
Que asco, no tengo ideas. :(
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