Química ilegal (Camren)

Capítulo 14

NARRA CAMILA:

Unos dulces besos en el hombro me despertaron. Sonreí aún con los ojos cerrados mientras sentía como los besos iban subiendo hasta mi cuello.

- Buenos días. - Dijo Lauren en mi oído.

Sonreí un poco más pero me hice la dormida para que no pararan los besos.

- Camz... Sé que estás despierta, te veo sonreír.

Me di la vuelta y abrí un ojo para mirar lo preciosa que se veía por la mañana... Bueno, en realidad se ve preciosa siempre.

- Buenos días. - Dije sonriendo y apoyando mi cabeza en su pecho. - ¿Cómo has dormido?

- Mmmm, muy muy bien. - Dijo robándome un beso. - ¿Y tú?

- Muy muy genial.

- ¿Muy muy genial? - Dijo riendo.

Pasamos toda la mañana entre besos y caricias.

No queríamos salir de la cama pero por desgracia Lauren sugirió que era buena idea ir a desayunar. Yo le dije que podríamos desayunarnos mutuamente pero dijo que necesitábamos algo que alimentara más.

Nos sentamos en la mesa del comedor con el desayuno delante.

Lauren había preparado mis dulces favoritos.

- Lolo, había pensado algo.

- Dime, Camz.

- ¿Por qué no nos vamos a practicar el kamasutra por toda Europa? - Dije muy seria.

- Camz... ¿Qué...?

- ¡Era una broma! - Dije riendo. - En realidad nos vamos a una casa rural a practicar todas las posturas del kamasutra.

Lauren se quedó en shock unos segundos y casi podía oir los engranajes en su cabeza mientras pensaba en una respuesta coherente.

- Camz... - Empezó a hablar pero no la dejé terminar.

- Ya sabes... Un lugar donde haya un jacuzzi... Entrar en él con bañador y salir habiéndolo perdido... - Dije mientras la seducía acercándome a sus labios con un poco de nata en el dedo.

Pasé la nata por sus labios y luego lo limpié con los míos.

- ¿Te gusta la idea?

- Me encanta pero estamos en pleno curs...

- Sh sh, nada de peros. - Dije besándola y haciéndola callar.

NARRA LAUREN:

- Entonces tenemos que organizarlo todo, Camz. - Dije levantándose para agarrar el portátil. - Vamos a buscar una casa rural donde quedarnos y...

- Sí sí, tú ve buscando y yo preparo las maletas.

- ¿Las maletas? - Dije abriendo mucho los ojos. - ¿Es que nos vamos ya?

- Pues claro, tontita. Es el primer día de las vacaciones de Semana Santa, tenemos que aprovecharlas.

Empecé a ponerme muy nerviosa por todo lo que había que preparar y por el poco tiempo que teníamos para hacerlo.

De alguna extraña forma conseguimos prepararlo todo a tiempo y meternos en el coche para empezar el viaje.

Camila le había dicho a Dinah que le cubriera con sus padres.

Camila estuvo los veinte primeros minutos del trayecto cantando canciones de One Direction y otros treinta dormida.

Cuando se hubo despertado fue mi turno de elegir canciones. Puse canciones de The 1975, Nirvana... etc hasta que Camila se cansó y pidió que paráramos en una estación de servicio para comer algo.

Entramos en el bar de la estación y nos sentamos a esperar al camarero.

- ¿Qué vas a pedir?

- Mmmm... Una banana,

- ¿Una banana? - Pregunté riéndome.

- Sí. - Dijo sonriendo. - ¡Ah! Y Nutella.

- Camz, es la hora de almorzar...

- ¡Entonces pizza!

- Pues pizza entonces.

- Y una banana.

Después de comer fuimos a la tienda para comprar unas botellas de agua para el camino. Yo fui a por unas chocolatinas mientras que Camz cogía el agua.

Pusimos las cosas en el mostrador y cuando levanté la cabeza para preguntarle a la chica cuanto era todo me encontré con unos preciosos ojos azules que conocía perfectamente.

- ¿Sam? - Dije abriendo mucho los ojos.

- ¿Lau Lauren? - Dijo. - ¿Qu qué haces aquí?

- Pues Camz y yo vamos de viaje a una casa rural. - Dije señalando a Camila. - ¿Qué haces tú aquí?

- Este es mi trabajo de vacaciones de Semana Santa. - Hizo una pausa. - La universidad no es barata.

- ¿Os conocéis? - Preguntó Camila agarrándome la mano para hacerle ver a Sam que ella estaba conmigo.

De pronto sentí como un escalofrío recorría mi espalda.

Camila sabe todo lo que pasó con Sam.

Oh oh.

- Sí. - Dije acercándome más a Camz. - Desde hace un tiempo.

- Así que tú eres la famosa Camila. - Dijo Sam sonriendo. - Lauren tenía razón, eres adorable.

Camila sonrió y yo suspiré internamente.

- Lauren, sigues estando tan buena como siempre.

Yo me sonrojé y miré a Camila la cual había fruncido el ceño en señal de celos.

- Sí, mi novia está buenísima. - Dijo Camila.

- Mmmm. Bueno Sam, un placer... Nosotras tenemos que irn...

- No os vayáis. - Dijo Sam interrumpiéndome. - Vamos a la cafetería a tomar algo. Yo invito, total trabajo aquí.

- Yo creo que no es buena ide... - Dije pero volvieron a interrumpirme.

- Claro. - Respondió Camila. - ¿Por qué no?

Las tres nos sentamos en la cafetería y pedimos unos refrescos.

Sam se había sentado al lado mía pero yo me pegué más a Camila.

Tenía un mal presentimiento.

Mientras nos los tomábamos estábamos conversando sobre temas triviales.

Sabía que Camila era capaz de saltarle a Sam al cuello en cualquier momento así que agarré su mano para intentar relajarla.

Y entonces Sam habló.

Casi quise matarla.

- Oye, ¿os apetece un trío? - Dijo Sam.

- ¿Qué? - Preguntó Camila.