Capitulo 4

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Narra Laura

Toda la cafetería nos miraba. Y gracias a Dios el director ni nadie de autoridad nos ha visto.

Esto me quito el apetito. Tire mi bandeja a la basura, si arroje la bandeja a la basura, deben de haber mil bandejas, dos no harán falta. Digo dos porque Ross hizo lo mismo.

Salimos de la cafetería y seguíamos caminando sin rumbo por los pasillos.

---No tenías que hacerlo---dijo Ross rompiendo el silencio, metiendo sus manos en los bolsillos de su chaqueta---

---Es mi obligación---respondí caminando de espaldas con mis manos en la espalda---

---¿Porque lo dices?---preguntó Ross sonriendo---

Narra Ross

Laura caminaba de espaldas con las manos cruzadas en su espalda. Yo la miraba expectante

---Porque...eres muy especial para mí---respondió ella---

Estábamos a centímetros de nuestras bocas cuando ella choco con un árbol ya que sin saberlo habíamos llegado al patio.

Como decía, Laura chocó contra un árbol y a mí no me dio tiempo de frenar. Nuestros labios estaban juntos pero sin moverse. Por arte de amiga después de unos segundos nuestros labios hacían una hermosa danza. Nuestras lenguas no tardaron en aparecer.

¡Wow!

Es el mejor beso que he tenido en mi vida. Sus labios son tan..tan...tan irresistibles. Nos acercamos más haciendo que nuestros cuerpos técnicamente sean uno.

Laura salto y enrollo sus pies en mis caderas y yo le agarre las nalgas, y muy hermosa sensación por cierto. Duramos así..no sé cuánto tiempo.

Pero algo me hizo separarme de ella. Un golpe, en mi cadera. Laura se desenrolló rápidamente de mis caderas callendo torpemente de pie. Yo volé por los aires adolorido.

Solo escuchaba el llanto de Laura.

---¡MALNACIDO HIJO DE PUTA DEL DEMONIO!---gritaba Laura sin parar a no se quien---

Tenía los ojos cerrados y sentía un líquido expandirse.

---¿¡PORQUE MALDITO TOMAS!?---gritó Laura sentada a mi lado---

Narra Laura

Tomas

Golpeó

Ross

Silla

Sangre

Hospital

Esas eran las únicas palabras que estaban en mi cabeza.

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