Capítulo 20

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-¿No vas a hablarme nunca más?-

Llevábamos tres días encerrados, entre intensos interrogatorios y todo tipo de discursos de los policías para intentar hacernos sentir mal por todas las cosas horribles que habíamos hecho. Como si me importara un mínimo lo que pensaran. Hoy era el día del juicio, y a Tora se le había ocurrido la maravillosa idea de darme conversación justo ahora.

-Shinji, ¿no podemos hablar luego?-

-¿Y por qué no ahora? ¿Qué coño nos queda por perder?-se levantó del banco en el que estaba sentado-¡Porque si encima de estar encerrado tengo que aguantar que no me hables yo no respondo!-se acercó a mí y me levantó del cuello de la camisa-¡No respondo!-

-¿Quieres pegarme? Porque ya es lo que te falta para terminar de hundirme, gilipollas.-a estas alturas no me iba a cortar un pelo en lo que le dijera

-Dios-me soltó-¡¿Me vas a decir ahora qué coño es lo que ha pasado entre nosotros?! ¡Porque yo sigo sin entenderlo!-

-Vale, bien, te lo voy a explicar muuuy despacito porque ya está más que visto que eres lentito...-respiré hondo para soltarlo todo por fin-Me gustas, estoy enamorado de ti, ¿sabes lo que es eso? No verdad, porque eres una puta piedra y siempre lo has sido, ¡pero yo no! ¡Y estoy harto! ¡Nunca te enteras de nada, nunca tienes en cuenta lo que yo siento! ¡Ahora solo quiero que esto pase ya y que nos separen de una puta vez porque no quiero verte más!-me salí de mí mismo, le había gritado con todas mis fuerzas, creo que ni siquiera el guarda se había atrevido a acercarse, si nos matábamos entre nosotros mejor que mejor para el estado

Se había quedado ahí, con cara de gilipollas, y yo tenía unas ganas incontrolables de soltarle un bofetón.

-¿Vas a decir algo tú ahora?-le pregunté

Silencio. Me decidí a darle esa bofetada que cortó el aire.

-¡Dime algo joder, Shinji!-estaba al borde del llanto

-Akira, yo...-

-¡¿Akira, yo, qué?! ¡No puedo esperarme toda mi vida! ¡No quiero una puta disculpa!-

-¡¿Y qué quieres?!-

Cuando nos ponemos a gritar los dos las cosas no pueden acabar bien.

-¡Que me beses!-

Sorprendentemente cumplió mi petición, con rabia, mordiéndome el labio inferior.

-Joder Shinji-

-Cuando nos metan en el trullo y nos den una celda bonita te follaré todas las noches.-

-¿Ah?-

-Bueno te... ''haré el amor'' o como coño quieras llamarlo, ¿quieres salir conmigo?-

-¡Pero qué clase de manera de pedirlo es esa!-

-¿Y qué quieres? ¿Rosas? ¡No seas marica! ¡Me gustas, Akira! Estaba muy colgado por Uruha, pero cuando te enfadaste conmigo lo que me preocupaba era solo eso, y lo que le pasara a Shima empezó a traérmela al pairo. Me gustas tú.-

Por muy bruta que sonara, esa era la mejor declaración que iba a obtener de él.

-¿Y qué hacemos? Porque encerrarnos nos van a encerrar-

-Con la pelota que te tiene a ti Ruki seguro que te cae la mitad de la condena-soltó una carcajada como hacía mucho que no lo hacía, y recordé lo maravillosa que era su risa

-Me importa una mierda, si me encierran contigo está bien-me acerqué a él-¿Está bien si...?-acerqué mis labios a los suyos

-¿Te pone pedirme permiso?-una sonrisa traviesa-Así me siento más malote-pasó sus manos por mis nalgas, apretándolas

NantaimoriDonde viven las historias. Descúbrelo ahora