~18~

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No podía dejar de observar los músculos de su abdomen. Madre mía. Tenía que ser un delito estar así de bueno. Sus bíceps se contraían cada vez que levantaba el brazo para posar el cigarro en sus labios. Mis elefantes corrían de lado a lado amenazando con salir de mi estómago. No me gustaba el efecto que causaba en mí, seguro que se me caía la baba y tenía cara de boba hipnotizada peor que la usual.

-¿Te gusta lo que ves? -dijo con esa sonrisa tan irresistible que hacía que cualquiera se derritiera. Joder, eso no me podía estar pasando a mí.

-En verdad pensaba que eres horrible. Me causas náuseas -esperaba haber tenido un poco de convicción en la voz, ya que era obvio que me encantaba lo que veía.

-Seguro -dijo con ironía.

Ian se estaba acabando el cigarro y me lo tendió. Al principio no entendí qué era lo que quería, pero en seguida caí en la cuenta de que quería que le diera una calada. Ese hombre estaba loco.

-Yo no fumo -aparté su mano con el cigarro lo más lejos posible de mi ser.

-¿Lo has probado alguna vez? -negué automáticamente. No me agradaba mucho la idea. Si apenas soportaba el olor, era obvio que no lo había probado.

-No es que me entusiasme mucho la idea, sinceramente.

Ian decidió sentarse a mi lado haciendo que sus abdominales parecieran michelines. Dio una larga calada al cigarro, me agarró las mejillas con una mano, hizo que entrabriera los labios y luego giró mi cara para que lo mirara directamente. Acercó sus labios a los míos peligrosamente, estaban a milímetros. Si alguno de los dos hablaba, se tocarían. Observé sus preciosos ojos que no dejaban de evaluarme ni un segundo. Ian empezó a soltar el humo de la calada en mis labios. Era inevitable, se colaba en mi cavidad bucal como un intruso. Empecé a entrar en pánico, no sabía qué tenía que hacer con ese humo cargado de nicotina asesina. Así que opté por intentar tragarlo, cosa que hizo que mi garganta doliera y mis ojos se pusieran vidriosos. Acabé expulsando el humo tal y como Ian había hecho. Él lo recibió sin problemas y lo soltó mirando hacia a un lado.

-Bien hecho, princesita -sonrió. ¿Me había felicitado como si fuera un perro que le acababa de traer la pelotita? No pude objetar nada porque seguíamos estando peligrosamente cerca, si hablaba nuestros labios estarían juntos. De repente pasó a mirarme los labios, inconscientemente yo también lo hice. Eran tan carnosos, tan deseables, tan... prohibidos. No me apetecía besar al chico que estuvo besando a Megan y que seguro que estuvo con su lengua ahí abajo. Me causaba escalofríos solo pensarlo. Pero por suerte, mi querido amigo Christian me llamó y pude separarme antes de arrepentirme.

-Hola Chris -sonreí satisfecha de haberme salvado.

-Eider, lo hice. ¡Le pedí una cita a Sky! -parecía horrorizado. La voz le vacilaba un poco.

-¿Y? ¿Qué dijo? -llevé inconscientemente la mano libre a mi boca para morderme las uñas, pero Ian la apartó de inmediato ganándose una mirada profunda de odio.

-Que no -suspiró. Algo en mi interior se partió -. Lo sabía, por eso te dije que le preguntaras tú. Para saber si tenía una mínima posibilidad. Pero Sky es demasiado testaruda y siempre se ha negado al amor. Eider te necesito, estoy muy triste -volvió a suspirar. Joder, eso era mi culpa. No debí haberle dicho nada.

-Ya voy para allá, mándame tu dirección por mensaje -colgué sin esperar respuesta.

-¿Dónde vas? -preguntó Ian el curioso.

-Con un amigo.

-¿A dónde?

-A su casa, supongo.

-¿Para hacer qué? -maldito cuestionario.

-Follar un rato mientras llega otra amiga que después se unirá a la fiesta. O sea que estaré haciendo un trío -la cara de Ian se descompuso y no pude evitar soltar una carcajada.

-¿La amiga que se unirá está buena? Digo para que él se quede con ella y así me uno yo y me quedo contigo -aguanté como pude el sonrojo aún que no creí que diera mucho resultado.

-Ni en sueños follaría contigo -pusé la mejor cara de asco que podía poner ya que en mi interior algo se removía eufórico.

-En mis sueños lo haces y disfrutas demasiado la experiencia -sonrió torcidamente.

Suerte que el mensaje de la dirección de Chris me salvó de otro momento incómodo.

-Bueno, me tengo que ir. Adiós -quise caminar pero el brazo de Ian aprisionó al mío.

-¿Quieres que te lleve?

-No, puedo ir sola, pero gracias -me solté de su brazo y empecé a caminar dirección casa de Chris. No me gustaba la idea de dejar a Ian solo en mi casa, pero no podía hacer otra cosa; Christian me necesitaba.

Ian's PoV

La ira fue aumentando a cada paso que daba mientras se alejaba de mí. ¿De verdad se iba a follar con el chico de la llamada? Esperaba que eso no fuera cierto. No podía ser cierto. ¿Verdad? Ella no era así. No era tan zorra como las demás, en especial Megan. Tengo que admitir que había algo en Megan que me atraía a caer en su maldito juego. Quizá fuese su movimiento de caderas que hacía que mi polla se encendiera y una vez se levantara ya solo podía pensar con el pene. No me gustaba que siempre se restregara contra él, hacía que se levantara por mucho que no quisiera. Y no pensaba ir con erecciones a clase. Por eso tenía que saciar lo que me provocaba aquella zorra. Lo que más odiaba era que no podía negarme. Era una guarra, eso lo hacía todo más interesante. No entraré en detalles.

Lo que no me esperaba era que sintiera esa impotencia en el cuerpo y esas ganas de asesinar gente.

Vale, no podía más. Necesitaba ir tras Eider, necesitaba saber qué hacía, con quién iría...

La necesitaba seguir, y no me iba a quedar con las ganas de hacerlo.





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HIIIIIII!!!!!

¿Qué os ha parecido el capítulo? Ian va presentando celos:$ ya mismo tendremos escena de celos máxima y alguna pelea entre Mark e Ian.

Votad si os ha gustado y comentad que os gustaría que pasara o que os ha parecido o lo que os apetezca.

Sentimos cierta curiosidad, queremos saber de qué parte se nos lee. ¿De dónde sois, queridas/os lectoras/es?

Nosotras somos españolas:3

Por cierto, queríamos deciros que sentimos tardar tanto en actualizar y que también hemos pensado en dar nuestras historias independientes para que no se os haga tan larga la espera.

La primera historia, que está publicada desde hace más tiempo y tiene más visitas y votos es de Julia. Su historia es Soy de acero (juliatomasp). Trata sobre una chica llamada Camille, huérfana, que pasa de no tener nada en ese orfanato a tener todo lo que pueda imaginar. Empieza a ir a clases, hace amigos y enemigos; pero sobretodo conoce a Christian, el cual le traerá varios problemas. Christian es un chico lleno de tatuajes que vuelve loca a cualquiera, un pasado oscuro le hace ser mujeriego y odiar el amor. En cambio Camille cree firmemente en el amor verdadero y cree que será feliz enamorada; como en los libros que siempre lee.

Obviamente la explicación no la daremos muy amplia, si os ha interesado podéis leerla. Os encantará.

La segunda historia, que tiene menos tiempo, visitas y votos es de Lidia. Su historia es Living with demons (Lydiaseggom) una chica llamada Naroa a la cual un suicidio la deja muy marcada. Ha tenido que aprender a vivir sola y valerse por si misma, cosa que ha hecho que viva a base de mentiras, asesinatos, alcohol, drogas y sexo. En una pelea de boxeo de un amigo conoce a Edward, el cual también tiene un pasado oscuro que le hace ser rudo, mujeriego, obsesivo, posesivo y tener que desahogarse a golpes. Ambos son violentos y tienen la mente perturbada.

Whoaaaah!! Son ambas historias geniales y completamente diferentes.

WeU

My AssistantDonde viven las historias. Descúbrelo ahora