Life is a Game

Salidas

Y tal como lo prometió, Ari en diez minutos estuvo en la puerta de mi habitación.

-Pero sí que eres rápida cuando se trata de chismes, no?

-Emma, déjate de rodeos, esto es importante, cuéntalo todo...

-Está bien, en la fiesta un tipo se intentó pasar de listo conmigo, llegó el y lo puso en su lugar, él se puso furioso por Dios sabe que, y me llevó a un parque donde me dijo que me quería y... - susurré- me besó...

-Que?! Pero como no se te ocurrió contarme esto antes, no te das cuenta? Esto lo cambia todo!

-Déjame terminar, al instante en que dijo esas palabras se arrepintió totalmente de todo, confuso no?- me lancé en mi cama tapándome la cara con las manos- imagínate que el tipo que te gusta, llegue te diga que siente lo mismo que tú, pero que luego de todo eso, dice que lo tiene que pensar mejor, porque no está seguro, cómo te sentirías?!

-Y en realidad no tengo palabras, no puedo creer, todo lo que me estás diciendo... Pero sabes qué? Porque no vamos al centro comercial, tomamos un helado y nos paseamos, inclusive podemos comprar algo, te parece? Aunque no sé ni para que te lo pregunto porque de todas formas no aceptaré un no como respuesta.

-Está bien, está bien- levanté las manos al aire- elige algo para que me cambie mientras que entro al baño.

-Estupendo...

Minutos después salí ya lista con la ropa que Ari me había preparado, tomé mi celular y dinero que era lo único que necesitaría.
Bajamos a la cocina y mi papá estaba preparando algo para comer, la verdad es que no sé cuál era el nombre de eso pero olía delicioso.

-Hola- le sonreí y le di un beso en la mejilla- iremos con Ari al centro comercial, quieres algo?

-No preciosa, puedes ir tranquila, solamente que no llegues tarde, que hoy vamos a ir a cenar con una familia nueva que llegó al vecindario, y no me lo vas a creer, pero entró a trabajar a mi misma empresa, así que queremos hacernos amigos de ellos, y que mejor que con una cena, no?

-Por supuesto papá- estiré a Ari del brazo- vamos que se nos hace tarde...

-Nos vemos luego Señor Hudson.

-Hasta luego Ari- le sonrió.

Era un hermoso día, soleado, cosa que agradecía. Comenzamos a caminar con Ari hasta la parada del autobús.

-Te sigue molestando lo de Derek?

-Si... Un poco... Pero seguro que se me pasa, es una cosa sin sentido...

-Vamos Emma, quita esa cara, que apenas lleguemos yo te invito el helado y de seguro que cambias esa expresión.

Yo quería demasiado a Ari, ella siempre me estuvo apoyando en todos los momentos que la necesite, nunca me falló, y por ese motivo pienso que hay muy pocas amigas como ella, en este momento, y yo soy muy afortunada.
Llegamos al centro comercial y enseguida paramos en la primera heladería que encontramos.
Sinceramente no le quería dar la razón a Ari, pero los helados pueden solucionar cualquier problema.
Compramos algunas remeras que me encantaron, y terminamos exhaustas por lo cual decidimos sentarnos en unos bancos.

-Te contaré un chiste que se te encantará y mejorará aún más tu ánimo- me miró expectante- bueno aquí va... Un señor llega al doctor con su bebe en brazos. Doctor, doctor, mi hijo tiene 6 meses y no abre los ojos. El doctor le hace un chequeo al bebe y le dice al padre: Señor, el que debe abrir los ojos es usted, este bebe es chino.- ella ni siquiera terminó bien el chiste y ya se comenzó a reír, mientras que yo sonreía porque fue malo verdaderamente- vamos ríete,yo sé que te ha encantado- se comenzó a secar sus lágrimas de risa- bueno Señorita A mí no me gustan los chistes, acompáñame al baño y luego vámonos ya, que se nos hará tarde.

-Ari... Fue simpático, sólo que... Por qué no vamos al baño?, que tienes razón llegaremos tarde y mi papá se enojará, ya sabes como es.

-Bueno...

Estábamos camino a los baños cuando Ari se detiene.

-Ari, entra y ya vámonos, que se nos hará tarde apúrate- la miro impaciente- que es lo que...- no pude ni terminar mi frase porque ahí estaba Derek, pero no estaba solo, también estaba Megan y lo peor de todo, se estaban besando...