Restaurantes veganos

58 4 2
                                    

Ya era la mañana siguiente y Ari me despertó con la excusa de que quería algo de comer.

-Vamos levántate Emma, tengo hambre- tocó su estómago- vamos escucha cómo está gruñendo- acercó su estómago a mi cara.

-Ariadna deja de molestar!- chillé tirándole la almohada que tenía más cerca- ayer hablé con mi tía Melody, preguntó por ti, y me contó además que  tiene un nuevo departamento, pero sigue insistiendo con que vaya a visitarla alguna vez.

-Y eso que tiene de malo? Levántate Emma!- me gritó.

-Dios!, pero sí que eres insoportable cuando tienes hambre, recuérdame porque seguimos siendo amigas- dije levantándome de la cama y alisando mi pijama.

-Tú me amas, cállate, no podrías vivir sin mí, ni cinco minu...- le tiré otra almohada-Deja de tirarme almohadas!

Comencé a reír, hasta que sentí una almohada en la cara que hizo que cayera al piso, pero seguía sin poder parar de reír.

-Te lo juro tenías que ver tu cara- hablé entre carcajadas- fue fenomenal- continúe riendo- está bien, está bien- alcé las manos en símbolo de rendición- espérame cinco minutos, me cambiaré y podremos ir a desayunar.

Era domingo y lo único que quería hacer era ver mi serie todo el día en mi pieza con un cuenco de palomitas de maíz, pero como siempre Ari tenía planes muy diferentes.

-Que te parece si vamos al restaurante vegano que está frente al shopping?, de paso podemos invitar a Anne para que se nos una.

-Creo que me parece bien, ella es nueva aquí, seguro no conoce mucho del lugar, me cambiaré para poder irnos.

-Si! Pero rápido hace veinte minutos que vienes diciendo lo mismo- puso los ojos en blanco- moriré, moriré, si no como algo- comenzó a tararear.

-Pero que dramática eres -chillé, mientras iba a mi ropero a quitar el conjunto que me pondría hoy.

Al salir del baño Ari estaba con su celular tirada en mi cama que por lo visto ella arregló.

-Nos vamos?

-Si!- comenzó a hacer un baile de victoria, hasta que por fin salió corriendo por la puerta de mi habitación y fue a hablar con mis padres.

En la sala pude ver a mi papá leyendo el periódico mientras que mi mamá estaba hablando con Ari.

-Si Señora Hudson, simplemente iremos por algo de comer con Anne y luego iremos a ver unas películas, claro si usted nos da permiso- comenzó a mirarla como el gato con botas a uno de los soldados en Shrek.

-De acuerdo Ari vayan pero se cuidan y no dejes que Emma coma chocolate que ya sabes cómo se pone luego- le guiñó un ojo.

-Mamá! No necesito que Ari cuide de mí- puse los ojos en blanco- y tampoco quiero que hables de mí como si no estuviera en la habitación- protesté.

-Está bien amor deja lo gruñona de lado- me dio un beso en la frente- ve a divertirte, nada más les pido que no lleguen muy tarde, si quieres hoy puedes quedarte a cenar con nosotros total sabes que ya eres como de nuestra familia Ari, e invita a Anne por si quiere venir, nada más avísame para que pueda preparar más grande la comida.

-Bueno mami- me despedí de mi papá y le di un beso en la frente- adiós papi.

Minutos después estábamos camino a la casa de Anne, le hubiéramos enviado un mensaje pero se nos pasó pedirle su número de teléfono.

Llegamos y tocamos la puerta, siempre admiraba lo bonito que era su porche, minutos después Abby nos abrió la puerta con una sonrisa en la cara.

-Oh niñas, estoy tan feliz de que estén aquí ni se imaginan lo que me costó que Anne se levante pero creo que con ustedes aquí ella por fin saldrá de su habitación, no sé qué le ocurre, es mejor que vayan a ver por sí mismas.

Subimos a la habitación de Anne, toqué la puerta pero como nadie respondió decidí entrar, al diablo eso de invadir el espacio personal.

Lo primero que vimos fue una Anne enterrada debajo de mínimo diez sabanas, con el pelo enmarañado y con lágrimas en los ojos.

-Mamá te dije mil veces que necesito estar sola! Ah... Son ustedes... Qué tal?- Se acomodó en su cama limpiándose las lágrimas.

-Nosotras bien, pero no podemos decir lo mismo de ti, qué te pasó?

-Nada, nada, después de la cena salimos con Connor, y nos encontramos con alguien que no nos cae muy bien y bueno, hubieron problemas- luego de eso hubo un silencio que nosotros interpretamos como que no quería seguir hablando de eso a lo que nosotros estuvimos de acuerdo.

-Sea lo que sea, no merece que estés así, porqué no te preparas para ir a comer con Ari y conmigo, así de paso vemos unas películas, te ayudo a prepararte?- me acerqué a ella y levante las sabanas- Ari tú ve a buscar en su armario algo para que pueda ponerse algo.

Y así logramos que Anne salga de su encierro.

Life is a GameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora