The Second Origin Of Humanity

Capítulo VII

Cedric volvió a casa y directamente se dirigió hasta su padre Jared, el cual se encontraba cortando leña.

-Papa tengo que contarte algo muy importante.

Jared dejó el hacha y le prestó atención a su hijo.

-¿Qué ocurre?

-Al parecer Eileen se ha estado reuniendo con otra persona.

-¿Con quién?

-No lo sé.

Sin decir nada más, Jared salió en dirección a su mujer. Alba estaba cosiendo ropa para sus hijos cuando vio a su marido muy alterado, dejó de lado las tareas que la ocupaban y fue corriendo a su encuentro.

-¿Qué pasa amor?

-No estamos solos.

...

-No es buena idea, Eileen.

-Venga Ian. Mi familia no va a matarte.

-Eso espero. -Dijo Ian para quitar tensión al ambiente.

Eileen no fue capaz de controlar la sonrisa.

Juntos se dirigieron a su casa para curarle la herida. Enseguida divisaron la cabaña donde la chica a crecido.

-Vaya...

-¿Te gusta?

-Es muy bonita.

Eileen le cogió de la mano y lo llevó dentro de la casa, pero enseguida aparecieron Jared, Cedric, Owen y Alba. Parecían bastante serios.

-Mama, Ian necesita ayuda. Se le ha infectado una herida.

Alba miró a su marido y le hizo señales al joven para que la acompañara seguido de los dos hijos, dejando a solas a Jared y a Eileen.

-¿Papa, qué ocurre?

-¿Por qué no nos dijiste nada?

Eileen se mordió la parte interior de la mejilla.

-¿Os lo ha contado Iktan?

-Eso no importa. Deberías avisarnos. Puede ser peligroso.

-Pero no lo es.

-Tú no lo sabes.

-Claro que lo sé. Él es el único que me comprende. -Dijo Eileen sin poder reprimir una lágrima, la cual corrió libre por su rostro.

La chica no quería estar más tiempo allí, así que salió corriendo en dirección a Ian. De camino se encontró con su hermano mayor Iktan.

-Eres un mentiroso.

-¿De qué me estás hablando? -Dijo sorprendido Iktan, el cual no entendía el ataque de su hermana.

-Me juraste que no se lo dirías a nadie.

-Y no lo he hecho, muy a mi pesar.

-¡Mentira! No vuelvas a dirigirme la palabra...

Eileen volvió a encaminarse hasta su amigo. Se encontraba en el salón, Alba le estaba curando la herida. En cuanto lo ve, a Eileen se le olvida todo, solo existen ellos dos.