[HIATUS] Un Millón de Piezas • {Navi Mini Fic}

Día 07

No supo qué hora era. Lo único de lo que era consciente Wonsik era de las lágrimas que salían a borbotones de sus ojos. Se las limpió y sorbió por la nariz, procurando que no mojasen el papel de aquella breve nota que escribió. Arrancó el papel con suavidad para no hacer ruido, la dejó sobre la mesita de noche y dio media vuelta hacia la salida.
No miró de nuevo a Hakyeon. Sentía que si lo hacía perdería su autocontrol.

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Trató de comprender por qué.
Su móvil sonaba frenéticamente sobre la mesa de noche, el mismo lugar donde encontró la nota que lo dejó completamente pasmado.
La leyó por enésima vez, incrédulo.

Finalmente, con un brusco chasquido de lengua, se estiró a recoger aquel molesto artefacto. Todo su cuerpo se quejó, pero Hakyeon hizo caso omiso y contestó la llamada.
—¿Hola? —espetó, rabia impregnada en esa única palabra.
La persona al otro lado de la línea carraspeó. —Hakyeon —la voz suave de Taekwoon llegó a su oído, tomándolo con la guardia baja—. Sé que tu viaje es hasta mañana, no quiero molestarte o interrumpirlo, ya sabes que no me gusta inmiscuirme en...
—Sólo dilo —le interrumpió, rodando los ojos.
—Estoy nervioso —su voz al otro lado de la línea tembló—. Toda su familia estará allí y yo... No sé qué hacer.
Se quedó en silencio unos segundos. Había pasado por tanto junto a Taekwoon, que ya se lo conocía de pies a cabeza. No sólo estaba nervioso, tenía miedo a fallar... Así era con todo lo que le importaba.
Tragó saliva amargamente.
—Estarás bien —Hakyeon trató de reconfortarle. Aunque se dio cuenta de que el peso en su corazón no era por la mención de ese compromiso, sino por las crecientes ganas de echarse a llorar por Wonsik—. Sólo no te tropieces mientras caminas al altar.
Su amigo al otro lado de la línea se rió, y hablaron unos minutos más antes de que Hakyeon se levantara a hacer sus maletas.
Seguía levemente adolorido por la noche anterior, pero ignoró aquello. Después de tener todo listo y haberse dado una buena ducha, salió del hotel mientras se ponía su chaqueta presurosamente.
Definitivamente, las cosas no iban a quedarse así.

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—Y uno, y dos, tres y cuatro —coreaba la instructora, a la par que Wonsik bailaba con su hermana al ritmo lento del vals. Rodó los ojos, exasperado.
—¿Estás cumpliendo quince años, acaso? —acusó.
Su hermana resopló. —Es mi matrimonio. Agradece que te escogí a ti y no al primo Hyuk.
Ante aquel comentario apretó bruscamente el abdomen de ella contra su cuerpo, provocando que Woo Il jadeará enfadada. Lo golpeó en el hombro con fuerza, y la instructora de baile chasqueo sus dedos y cesó su molesto mantra.
—Será mejor que descansen —los miró a ambos con reproche, emprendiendo su camino fuera del salón.
Los hermanos Kim la observaron conteniendo una risa, y su madre negó divertida desde una esquina de la habitación.

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Cansado, se lanzó a su cama y maldijo todo. En Venecia ya había oscurecido casi por completo, él acababa de llegar de su larga travesía intentando encontrar información sobre Wonsik.
El hotel no podía dar nada, y no tenía pistas en los lugares aledaños. Estaba en un redondo y cerrado círculo. Movió su cuerpo para acomodarse sobre su costado, siendo llamada su atención por un destello rojo cerca de la almohada. Lentamente se estiró hasta allí, agarrando entre sus dedos la pulsera que anteriormente le había obsequiado a Wonsik.
Sabía lo que aquello significaba, claro, más no fue eso lo que hizo latir frenéticamente su corazón. Prendido al hilo estaba un pequeño pedazo de papel, con tres únicas palabras escritas en el.
Myeongdong, 44. 7:00pm.

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¡Hola!
Quiero agradecer a mi Emis pechocha por haber hecho la imagen con la frase, asdfasdasf❤️
Gracias por leer y hasta una próxima actualización~