~Mi Soldadito~

Capítulo 3

~Narra Jake~

Como detesto esto, no lo soporto, no puedo, detesto ver a las personas aterradas buscando refugio, simplemente no lo soporto.

Todo comenzó hace mas de un año, aunque hay rumores que dicen que los conflictos comenzaron hace mas de diez años. Yo para ese entonces era un niño de once años cuando me entere que mi padre había fallecido en una prueba militar, no era algo que yo haya querido escuchar solo había escuchado por accidente cuando mi madre le dijo a mi hermano y hermana. Desde ese entonces decidí ser un soldado, claro que a mi madre no le agrado y fue difícil poder convencerla, pero se que ella estara orgullosa de mi.

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Tras el temporal, el sargento mayor me mando a repartir proviciones a las familias que se resguardaban. Ese mismo día conocí a una tímida pero linda chica. Pelo rojizo como el rubí, ojos color miel muy profundos y una tierna y hermosa sonrisa. Era una chica sencilla pero...era linda. Sus labios eras rojos, demasiados diria yo, cielos, era muy bonita.

Hablamos bastante. Intentaba prestar atención a lo que decía, sus ojos me estaban volviendo loco. Se notaba que estaba nerviosa, eso me causaba ternura. Apenas podía hablar conmigo, no es por ser egocéntrico pero se que se ponía nerviosa por hablar conmigo y... Me gustaba

-Bueno... Me retiro-la miraba directamente a los ojos.

-Esta bien... Adiós-parecía algo tímida.

-Espera, no se tu nombre-levanto la mirada de inmediato.

-Soy Alison-note como jugaba con sus manos y sus mejillas tomaban un ligero color rosa. Pero que tierna.

-Un placer Alison-le sonreí para inspirarle confianza y luego me marche.

Tras mi vuelta a la base me sentía...me sentía algo extraño, no sabía que era y no sabía como explicarlo

Me gustó la estadía con ella, bueno, no estadía pero...hace mucho que no tenía una conversación con una chica, ni menos con una chica tan bonita como ella.
Alison...su nombre...no lo se...era hermoso, me causa algo pronuncialo, algo extraño.
¿Gustarme?, Claro que no, solo estuve cerca de una hora hablando con ella, imposible que me guste, además, no quiero tener una relación por ahora, menos en estas circunstancias sabiendo que algo podría pasarme. No, no, no, no me gusta y creo que será la primera y última vez que la veré, pues, tengo otras cosas que hacer.

Llegue a la base y me fui a la fogata que estaban haciendo mis compañeros para poder limpiar las armas.

-Jake... Jake-me repetía mi compañero-Hey Jake.

-A... Si, si-agite mi cabeza de un lado a otro intentando volver a la realidad-¿qué pasa?

-Vayamos a dormir, debemos estar despiertos a las cero cuatrocientas horas.

-ok, ok ya voy

Comí algo y me dirige a mi tienda de campaña. Me recosté e intente dormir.

Al despertar no hice mucho, solo me tocaba guardia, pues soy un soldado reciente y 'novato' por lo cual solo tengo misiones simples.

Tres días de guardia era horrible, no poder dormir por estar alerta de posibles ataques enemigos y por el sonido de las sirenas. No es nada agradable estar en frente de una guerra en donde es posible que mueras, además de ver a otras personas morir, no es que me arrepienta, solo que es duro estar desde el otro lado.

Hacía mi guardia, al cuarto día el sargento mayor me mando a vigilar el perímetro, es decir, otro día sin dormir.

Caminaba entremedio de los árboles, debía estar muy alerta, ya estaba oscureciendo y pronto no vería nada, por lo cual mis cinco sentidos debían estar muy atentos frente a cuaquier ruido.

Escuchaba cada animal, insecto e incluso el viento. Estaba muy alerta, tanto que logré escuchar unos pasos no tan cerca de mí. Con mucho cuidado y silencio me oculte entremedio de los arbustos para poder encontrar a mi objetivo, si era mi enemigo era claro que debía asesinarlo, si no pues, tendría que resguardar la espalda de mi compañero si es que era de un rango superior.

Observaba por entremedio de las ramas y hojas y pude notar una silueta de un hombre. Si, era un enemigo, tenía claro mi objetivo, solo debía apretar el gatillo y darle. Ya tenía todos mis cálculos, debía ser silencioso para no llamar la atención.

Estaba a punto de jalar el gatillo cuando...