Imagina 17 / Luke

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Este imagina es un fragmento de un libro que me gusto muchísimo...

Narras tú
Tome el reloj que estaba en mi velador eran las 8:30, decidí que era hora de levantarme ya que no había podido dormir bien y quedarse en la cama seria solo una pérdida de tiempo, pero aun así la flojera se apodero de mi cuerpo y me quede en la cama, sentí sonar el timbre de la casa pero no me quise levantar, siguió sonando insistentemente, me levante me puse mis zapatillas y baje a abrir, en la puerta se encontraba Luke, estaba muy sonriente y llevaba en una de sus manos una bolsa con un cartucho lleno de churros.

- Hola guapa - dijo y se inclinó a mis labios para dejar un cariñoso beso - ¿Cómo has dormido? - un escalofrió recorrió todo mi cuerpo aun no podía creer que este chico me haya escogido a mi habiendo muchas mejores.

- Buenos días - conteste nerviosa - he dormido más o menos bien.

- Me alegro.

- Pero... ¿Qué haces aquí?

- He venido a desayunar contigo - dijo caminando a la cocina, subí a mi habitación y me cambie de ropa ya que aún estaba en pijama, luego de unos minutos baje y desayunamos juntos.

- ¿Jugamos una cosa?

- ¿Jugar? ¿A qué? - Luke me lanzo una mirada picara que me hacía desconfiar.

- Espera

- Mmm - Luke dejo su taza en la mesa de centro y se levantó en busca de algo cuando por fin lo encontró volvió a donde yo estaba, lo miraba curiosa quería saber de qué se trataba todo esto.

- Te explico - comienza a hablar Luke cuando se sentó de nuevo en el sofá - ¿Nunca has jugado al equilibrio del beso? - yo negué - Perfecto, te explico - me entrego una servilleta - tienes que taparte los ojos.

- ¿Qué? ¡No voy a taparme los ojos! - Luke protesto en voz baja.

- Si no te los tapas no podemos jugar - termine accediendo solo porque no quiero que Luke se enoje conmigo.

- ¿Y ahora?

- ¿Ves algo? - pregunta Luke.

- No nada - sonríe y me coloca el libro en mis manos.

- Ahora levántate y ponte el libro en la cabeza - hago lo que me dice.

- No me gusta este juego - murmuro con voz de pequeña.

- Muy bien. Ahora ¡Comencemos! - siento que se coloca a mi lado - Tienes que evitar por todos los medios que el libro se caiga al suelo. El que más tiempo aguante con él en la cabeza es el que gana. Y no puedes tocarlo con las manos, claro.

- No entiendo nada.

- Ahora lo comprenderás - siento un calor en mi mejilla, al parecer Luke algo había colocado en aquella zona, era como una especie de pincel, luego recordé los churros de hace un rato, y el chocolate, ahora todo comenzaba a cuadrar, pegue un pequeño grito, pero el libro no cae.

- No me gusta este juego - repito alzando la voz.

- ¿No?

- ¡No!

- Te gustara - siento a Luke acercarse lentamente, siento sus labios presionarse suavemente donde antes estaba el chocolate, el libro tambalea un poco, pero continua en mi cabeza.

- Eres cruel.

- ¿Sí? - Luke vuelve a pasar algo, pero ahora en la zona de mi cuello, percibo un olor a chocolate.

- ¡Muy cruel!

- ¿De verdad?

- De verdad...- susurro, ahora es su lengua la que siento donde antes había chocolate, cierro los ojos aun estando con la servilleta en mis ojos, es muy cruel lo que está haciendo , pero me gusta, luego siento chocolate en mis labios, Luke pasa su lengua, recorriendo mis labios de izquierda a derecha y de derecha a izquierda. Después con su dedo me obliga a abrir ligeramente la boca y acaricia mi labio inferior con sus propios labios, suavemente, de menos a más, el chocolate se mezcla con su saliva, mi corazón se acelera como nunca antes lo había hecho. Luke me besa intensamente, sujetando mi rostro con sus manos, y entonces... el libro cae al suelo, a ninguno de los dos nos importó la verdad, Luke me coge de la mano para luego sentarme en el sofá, aun con la servilleta vendando mis ojos, pero jamás había visto nada con tanta claridad, y es que aquellos besos solo me habían confirmado que quería a aquel chico con los cinco sentidos.

Dato: Uno de sus programas de TV favoritos es How I Met Your Mother.

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