Desperté sola en la habitación como cada mañana ya que Jason se iba sin avisar, me puse un vestido que había encima de la cómoda como cada mañana me encontraba un vestido nuevo y limpio. Era de color morado pastel y me puse unas botas de montar que Lali me trajo hace unos días cuando empecé a montar con Jason. Me hice una coleta alta y salí de la habitación hasta salir por la puerta de la casa, me dirigí hacia los establos. No creo que Jason se enfade conmigo. Sólo voy a hacer lo que hago con él pero esta vez sola. Fui hacia el establo donde se encontraba Safira, estaba mirándome por las rejas.
-¿Te sientes prisionera como yo verdad? No te preocupes, algún día escaparemos de aquí- Le sonreí mientras le acariciaba el hocico, me recordaba a mi sólo que ella era preciosa.
Me monté en la blanca yegua y la dirigí a fuera del establo hacia el bosque. En estos días Jason me enseñó bastante bien a montar a caballo.
Necesitaba sentirme un poco libre, a un lado del castillo estaba Claudia la mujer que me pegó el primer día que vine aquí. Me miraba con asco y odio, aún no comprendía esos sentimientos hacia mí cuando yo sólo era una más, ella sin embargo era hermosa a mi lado, con curvas prominentes que podía volver loco a cualquier hombre. Miré hacia el frente nerviosa y volví a mirar, ya no estaba me sentí aliviada. Seguí mi camino haciendo memoria de cada árbol, cada roca o cualquier cosa que me pudiera guiar para mi escapada, podía irme en ese momento, sentía unas ganas inmensas de hacerlo pero antes quería ganarme la confianza de Jason para poder prepararlo aún mejor, debía aprenderme el bosque en ese tiempo y después huiría hacia mi país y volvería junto a mi padre.Anduvimos un buen rato al trote, hacía sentirme libre mientras el aire azotaba en mi cara y movía mi pelo. Paramos en el río que Jason me enseñó el primer día para descansar un rato, me senté en la orilla del río mientras Safira bebía del agua cristalina, de pronto el bosque quedó en silencio, alguien más andaba cerca de nosotras. Me quedé en silencio intentado escuchar algún ruido extraño pero no había nada fuera de lo normal, sólo silencio.
-¿Quién te a dicho que puedes salir de la habitación sin mí y mucho menos intentar huir?- Solté un gritito por estar desprevenida. Me cogió de la muñeca zarandeándome y apretándome junto a él.
-Huir... ¿Quién te a dicho que estaba huyendo?- Mi respiración era entrecortada. -Solo he salido a pasear como siempre hacemos, ¡no quería quedarme encerrada!- Nos quedamos mirándonos en silencio intentaba leerle su mirada pero no tenían expresión ninguna.
-Eres mi prisionera, no tienes derecho a salir sin que yo lo sepa ¡Ni si quiera tienes derecho a respirar sin que yo lo ordene!- Me echó a un lado para coger las riendas de Safira.
Quería llorar no era nadie para mandar en mi vida pero no le iba a dar esa satisfacción de verme llorar. Seguro que había sido Claudia quién le había inventado lo de huir para que Jason me pusiera un castigo ¿Por qué me odiaba tanto esa mujer? no tiene nada que envidiarme.
-Monta nos vamos parece que va a llover- dijo montándose en Sauro, hice lo mismo con Safira y fuimos para el castillo al galope. Comenzó a llover y nos pusimos empapados, el frío empezaba a calarse por nuestros huesos y al fin llegamos nos bajamos corriendo de los caballos. Mientras estos corrían para los establos. Jason cogió mi mano y tiró de mí empezamos a correr para llegar antes. Era una sensación tan extraña... Me daba calor con sólo tocarme.
Subimos a la habitación y me tiró una toalla.
-Sécate pronto o te enfermarás, voy a darme un baño. ¿Me acompañas?- Puso su cara de capullo que tanto odio y su ceja levantada, cómo odiaba ese gesto...
-Mmm.. no mejor espero a que acabes y ya después me doy un baño yo- Me sonrojé era un total imbécil porque disfrutaba haciéndome preguntas de ese tipo.
-Pues me da igual lo que digas, te bañaras conmigo.- Me cogió del brazo y tiró de mí hacia el baño.
-¡Jason no por favor déjame no quiero, por favor!- Empecé a tirar de mi brazo y a gritarle, no podía obligarme a bañarme con él, no quería que otra vez me viese desnuda me negaba por completo.
-Vamos, no voy a hacerte nada estúpida sólo es un baño- Cerró la puerta detrás suya, empezó a quitarse la ropa poco a poco mientras me miraba con esa media sonrisa, disfrutando de como estaba temblando y dando pasos hacia atrás hasta chocar con la pared.
-¿Necesitas ayuda para quitarte la ropa?-
''No por dios'' pensaba, mientras se acercaba a mí poco a poco disfrutando de cada minuto que para mí eran malditas horas.
-Jason, por favor- Traté de decirle más calmada mientras mi pecho se agitaba cada paso que daba hacia mí -No me obligues a hacer algo que no quiero por favor Jason yo...-
-¡Basta, te he dicho que no me llames por mi nombre y harás lo que yo diga para eso soy tu amo, no tienes derecho a hablarme ni si quiera, desnúdate!- Se le endureció el rostro y se paró esperando a que me desnudara y así hice.
Temblorosa empecé a bajar el vestido de mis hombros, mientras unos ojos me miraban fijos con un brillo de deseo.
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Venganza y deseo
Storie d'amoreLleno de ira y con un sólo objetivo, vengarse de la muerte de su familia. Hará todo lo que esté a su alcance para lograr su venganza, aunque eso le haga secuestrar a la única hija del clan enemigo.