"La chaparra y el chico de casi 2 metros".

565 34 6
                                    

Kylo.
Pasamos rápido después de todo, este lugar lo visitaba a menudo con mi madre y mi tío Luke, a mí padre no le agradaba mucho la comida mexicana pero si le gustaba pero generalmente no nos acompañaba, siempre estaba en su trabajo, "el empresario más rico de la ciudad".
Cuando nos dirigimos a nuestra mesa noté que Rey tenía una cara de asombro impresionante, los ojos le brillan aún más que de costumbre. Sentí de repente una sensación de revoltijo en mi estómago mientras la veía, "vaya... si tengo hambre" pensé al principio pero después llegó a mi mente las estúpidas mariposas en el estómago, "deam it".

Rey.
No podía creer la cantidad de cosas que había para comer y los condimentos que les podías poner, tantas salsas, hierbas, vegetales, "estoy en el paraíso" me dije.
Llegamos a nuestra mesa y Ben hizo una silla hacia atrás para indicarme que me sentara. A un lado de nosotros había una mesa de al menos 6 chicas viéndonos, en especial a Ben, después de que nos sentáramos les miré de manera que ni yo creía llegar a hacer, estaba celosa de que miraran a MÍ Ben.
-¿Qué rayos haces preciosa?.
-¿Yo?.
-¿Conoces a otra chica tan preciosa como tú?.-después de estas palabras hicieron una cara de tristeza y siguieron comiendo entre sollozos y lamentos, "tómen eso malditas" me dije.
-¡Ben!.
-¿Qué?, yo solo decía.
-¿Has venido varias veces aquí?
-Las suficientes, si. Adoro la comida de este lugar.
-Yo no conocía este lugar.
-Morirás al probar su especialidad.
-¿Cuál es?.
-El Pozole por supuesto.
Un mesero nos trajo una hoja alargada y una pluma, supongo que para apuntar nuestra orden en esta, Ben pidió por mí ya que yo no sabía cómo se servía la comida o con que, pidió lo mismo para los dos y un agua natural para cada uno.

Kylo.
Justo cuando nos sentamos pude sentir varias miradas sobre mí, eran de una mesa llena de chicas que me veían con cara de enamoradas, (claro porque soy demasiado sexy y apuesto), de reojo pude ver que Rey les echaba una mirada de celos así que decidí hacer un comentario para que ya no se preocupara por eso.
Finalmente después de lo que dije las chicas de al lado hicieron cara de perrito y siguieron comiendo.

Nuestros platos llegaron rápido, Rey se quedo mirando su plato con cara de asombro, yo solo me le quedé viendo y sentí en mi cara una sonrisa de idiota.
-Esto se ve delicioso.-dijo sin dejar de ver su plato.
-Y lo está, te lo aseguro.
-¿Qué condimentos le agregas tú?.
-Pues le pongo orégano, salsa, Chile de árbol y limón.
-Yo no sé qué es cada cosa, nunca había comido algo mexicano.-dijo ella ligeramente avergonzada.
-No te preocupes aquí tienes al experto.-dije arrogante.
-O si maestro enséñeme por favor.-respondió sarcástica.
-Ja, ja, ja.

Después estuvimos comiendo sin parar y platicándo de vez en cuando, ella no paraba de hacer comentarios como "esto está delicioso", "ahora amo a los mexicanos", etcétera.
Ya que terminamos pedimos un flan para los dos, ella me obligó a comer como si fuera bebe, (ella me daba las cucharadas en la boca), sé que a las chicas les parece romántico pero esto es realmente humillante, que sepa que solo lo hago por ella.

Cuando salimos la lleve a un parque donde venden helados riquísimos y hay un kiosko donde hay música y bailes en las tardes, era casi de noche y me pareció la idea perfecta.
-Dime algo...-le dije mientras caminábamos al rededor del parque tomados de la mano.
-Algo.
-Jaja no seas agua fiestas chaparra.
-¿Porqué chaparra?-dijo ligeramente indignada.
-Porque yo soy más alto y tú eres muy chiquita comparada a mi.
-¡Pero tú mides casi dos metros!.
-Si pero ¿cuánto mides tú?.
-...1.60.
-¿Vez?, eres chiquita.
-Pero tú eres el Empire State.
-Hieres mis sentimientos preciosa.-respondí haciendo la víctima.
-Mira quién habla.
-Bueno bueno tienes razón.
-Te iba a decir que me dijeras, ¿por qué no me temes como los demás?.
-Supongo que porqué yo no soy "los demás", soy nueva y nose porque debería de temerte.
-Tienes razón, pero puedo llegar a ser un bastardo contigo.
-Bueno yo puedo ser toda una perra.
-Me agrada tu estilo Chaparra.
-Gracias, gracias.
-Supongo que eres "mi media naranja".
-No, tú eres mi media naranja.
-Como sea.-dije mientras la tomaba del hombro y la abrazaba.
-Ben...
-¿Si?.
-Te amo.
-Lo sé.-y después la besé.

Seguimos un buen rato hablando y bromeando en el parque. Se me ocurrió checar la hora en mi celular y vi que eran 8:45, vaya, ya era tarde, el tiempo pasa de manera sensacional mientras estoy con ella.

Rey.
Regresamos al edificio y cuando nos despedimos me abrazó y me alzó para que pudiera darle un largo beso y pegar nuestras frentes, "Buenas noches mi Reina", susurró. Pude sentir como mis cachetes estaban completamente rojos y me despedí muy atontada, cerré la puerta y me volteé: OH NO.

Let Me Love You. (AU Reylo Fanfic).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora