Capítulo siete
- La última de hoy señores y señoras -Empecé a tocar la última canción de ese día, 'You're beautiful' de James Blunt. Eran casi las nueve de la noche y podía jurar que iba a llover. Justo cuando acabé de tocar empezó a llover. Habían dos respuestas por el hecho de que predijera lo que iba a pasar; que soy de descendencia bruja o que vi las nubes grises. Si ponemos lógica al asunto, sería la segunda respuesta pero me hacía más gracia pensar lo primero. Estaba guardado la guitarra y de la nada empezó a llover más fuerte. El cierre se quedó atrancado a la mitad. Mierda, mierda y más mierda ¿Representa que la vida quería joderme un rato? Seguro que sí. Me senté bajo un árbol, mi única opción ya que no tenía mi móvil con batería. Estúpido móvil. Avancé un par de árboles más adelante y allí me encontré al chico de mirada azul- ¿Qué haces aquí?
- Sabía que me necesitarías
- Yo no necesito a nadie, y menos a ti -Bufé. Tronó más fuerte y él sacó un paraguas, debatiendo mentalmente si iría con este loco o no.-
- ¿Sigues pensado lo mismo? -Arqueó una ceja-
- Vale, vale... -Me cubrió con su paraguas y empezamos a andar- Gracias -Susurré cuando estábamos a mitad de camino. Solo sonrío, típico de él- ¿Por qué lo has hecho?
- Te dije que te cuidaría
- ¿Por qué? Es decir, nadie se preocupa así por otra persona y la cuida por nada
- No me pidas explicaciones
- Bien, bien como digas -Me alcé de hombros- ¿Cómo te llamas?
- Me llamo... -Vaciló un poco antes de contestar- me llamo James
- Bien, pues sensual rubio de ojos azules James ¿Qué edad tienes?
- Me encantan esos adjetivos -Río- Acabo de cumplir los 20
- Que viejo que eres sensual -Arqueó una ceja- ¿Qué pasa?
- ¿Sensual tantas veces seguidas?
- A ver, las cosas como son. Eres un sensual en toda regla -Reímos- Mi casa es esa de ahí James -Me acompañó con el paraguas hasta el frente de mi casa- ¿Me das tu número? -Asintió. Cogí su móvil y me guardé en la agenda. Le entregue el móvil y luego de despedirme con un beso en la mejilla me acerqué al portal de mi casa
- ¡Oye! -Miré hacia atrás- ¿Por qué te has guardado como 'sensual' en mi agenda?
- Por qué yo soy sensual -Le guiñé un ojo y abrieron la puerta- Adiós
- Adiós sensual -Río y luego se fue por el camino por donde habíamos venido. Saludé a mi madre y subí a mi habitación para dejar la guitarra y darme una ducha tibia. James era raro, pero a la vez sensual. Era un rarito sensual, aun así, tenía algo. Algo raro, algo muy raro.
Me puse una camiseta de tirantes y unos shorts, un poco cortos, pero solo eran para estar en casa. Entré en mis redes sociales y, en seguida me aburrí. Desde mi habitación oía los poderosos ronquidos de mi madre, dios mío, aquello no era mi madre, eso era una bestia. Me vestí con unos shorts de calle, una camiseta holgada y mis queridas y amadas converse. Estaba con mis auriculares paseando... por ahí. Caminé unas cuantas calles más cuando me paré frente una casa.
Esperad un momento... esa casa... ¡La de Louis! ¿Y yo por qué estaba aquí? ¿Acaso... acaso quería llegar aquí? No, déjate de estupideces Avril. Vi cómo se abría la puerta y de allí salía una chica pelirroja acabándose de atar el último botón de su camisa ¿Una chica? Un extraño sentimiento me recorrió entera ¿Celos? Estoy diciendo estupideces, más de lo normal.
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Destino por casualidad
أدب الهواة"Sería mucha casualidad que os volvierais a ver... no os volveríais a encontrar nunca" "No podéis estar juntos, él solo te quiere para el sexo" "El Karma te hará pagar por jugar de esa manera con sus sentimientos" "Ella no se enamora, solo jugará...