De repente entró alguien en silencio y me abrazó por detrás, puso sus manos en mi cintura y empezó a besarme el cuello. Era Dereck, por supuesto. Siempre me abrazaba así, cuando me pillaba desprevenida y a mi me encantaba. Giré mi cabeza para toparme con la suya y fundirnos en un beso. Nuestras lenguas estaban en completa sincronización y había una lucha en mi interior de sentimientos. No pude evitar el empujarlo hacia la cama y tirarme encima de el.
Empecé a chuparsela y notaba como se estremecía, cada movimiento de mi boca era un gemido suyo, acabó por correrse dentro de mi boca y me lo tragué. (Chicas, no es para tanto)
Justo entonces apareció su madre por la puerta y actuamos con la máxima normalidad. No vio nada por suerte, pero supongo que sospechaba algo. Al rato vino mi madre a recogernos, aun faltaba rato para la cena familiar, así que decidimos de ir a la bolera y Dereck vino con nosotros. Echamos una partida de bolos, ganó Dereck, ¿como se podía ser tan bueno en todo?.
Después nos fuimos al karaoke, la verdad es que me encanta cantar y no se me da del todo mal, pero me ponía nerviosa el echo de tener a Dereck delante observando.
Después de ese rato perfecto, Dereck se fue con la familia al igual que yo. Claro que estuvimos hablando por whattsap todo el rato.
Nuestra relación iba viento en popa.
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Madura, Idiota
Teen FictionMelanie es una adolescente con problemas. El principal? Buscar el amor con tanta ansia, para acabar dandose de morros y dejar de creer en los finales felices.