Imagen perfecta

Doblame hasta que me rompa

Acá traigo el segundo capitulo de esta hermosa historia, esta vez vemos las cosas desde el punto de vista de Seungcheol para que vean sus razones de hacer lo que hizo, no es justificativo pero ayuda a entenderlo, espero que les guste ^^

_____________________

Traducción autorizada 

 Autor: gamagamachan  

__________________________

02 | Doblame hasta que me rompa

Cuando Seungcheol vio por primera vez a Jihoon, se sintió atraído inmediatamente a esa torpeza – a la forma introvertida de Jihoon y, con el tiempo, aprendió a leer todas las diferentes expresiones en el rostro estoico de Jihoon. Incluso sin comunicación, Seungcheol siempre se enorgullecía de ser capaz de descifrar la mente de Jihoon, pero de alguna manera... en algún momento, las cosas comenzaron a cambiar.

El amor que una vez tuvo por Jihoon se convirtió en aburrimiento – incluso agobio. Sentarse a solas con Jihoon en el gran espacio que ambos llamaban hogar era agotador. Seungcheol siempre era el primero en comenzar una conversación, e incluso si lo hacía, Jihoon no se molestaba en prolongar el diálogo. Todas y cada vez eran un monólogo, y Seungcheol se encontró ahogándose en la desesperación.

Luego vino Jeonghan, entrando en la viciada situación como un soplo de aire fresco. No es como si Seungcheol hubiera puesto sus ojos en el hermoso muchacho desde el comienzo - él no era ese tipo de hombre. Él solo se dio cuenta de lo útil que era el chico bonito - lo opuesto de lo que había imaginado de alguien tan frágil y privilegiado. Jeonghan no hablaba mucho cuando estaban ellos dos solos, y, sabiendo de la sexualidad de Jeonghan, Seungcheol mantuvo la distancia, solamente interactuando con él cuando fuera necesario. Fue Jihoon quien los volvió más cercanos en realidad.

Ese día era un día de trabajo normal para Seungcheol. Perezosamente arrastró sus piernas hasta el primer piso cuando su teléfono brilló. Un mensaje de texto de Jihoon, pidiéndole recoger una tarta de cumpleaños para Jeonghan porque Jihoon se encontraba ocupado por el trabajo como de costumbre. Seungcheol ya se sentía aplastado por su trabajo y sus insensibles compañeros que se burlaban de su inexistente vida amorosa. Suspiró para sí mismo, caminando por la calle bajo los arboles que el otoño había transformado en un apasionado color rojo y naranja. Nada se sentía bien, incluso desde el momento en que entró en la tienda, recibiendo una orden equivocada y luego un montón de disculpas mientras esperaba otros treinta minutos por la torta cubierta de fresas.

Seungcheol se sentía como una fregona empapada en agua sucia cuando llegó a casa con el pelo peinado hacia atrás por el fuerte viento, y la torta apenas acunada en sus brazos temblorosos. Se recordó a si mismo que sólo era un mal día - Seungcheol solo estaba teniendo un mal día, pero al segundo en que Jeonghan lo vio, el chico bonito rápidamente salió corriendo, volviendo para secar el cabello de Seungcheol con una toalla limpia, tomando la torta de sus manos. Seungcheol se quedo sentado ahí, sintiéndose desorientado, sus ojos siguiendo el movimiento del bonito muchacho. No hubo palabras durante un largo tiempo – lo suficientemente largo como para que Seungcheol empezara a temer la incomodidad.

"... Feliz cumpleaños." Seungcheol murmuró, rompiendo el silencio. Jeonghan observó al amor de su primo, incapaz de contener la tristeza en su interior. Luego sonrió hermosamente.

"Gracias." Jeonghan inclinó su cabeza. El silencio siguió, pero así fue como Jeonghan se enamoró de Seungcheol, y esa fue la primera vez que Seungcheol se sintió atraído por aquella triste pero aun así hermosa sonrisa.