Abismo

14 0 0
                                    

Me sentía en el medio de un abismo, buscaba las mil y un maneras par salir de esta horrible realidad y (tal vez) ir a otra mejor, aunque no me iba a decepcionar si no había otra realidad mejor, no me iba a decepcionar si no había nada. Iba a estar feliz con el simple hecho de no tener que vivir día a día la rutina.
Ya estaba cansada de soñar todos los días que me moría, que aparecía en mi propio entierro, que me atropellaba un colectivo, ya estaba cansada. Estaba cansada de matarme lentamente con un simple encendedor y un cigarrillo en la mano. Cansaba estar todos los días disconforme con algo, simplemente cansaba. No voy a negar que busque muchas maneras de hacer que todo ese sentimiento de mierda se vaya.
Finalmente todos esos intentos fallidos fueron fallidos por una razón, supongo que era algo que me deparaba el destino o simplemente había unas mínimas ganas de vivir que me mantuvieron a flote (y que bueno que lo hicieron) porque llegó el día que te conocí a vos, que cambio todo rotundamente. Se podría decir que ese día fue el principio de mi nueva vida, mis nuevas experiencias y mas que nada, mi oportunidad. Tenias una mirada penetrante con la que con un simple vistazo marcabas tu presencia; una nariz tan perfecta que parecía tallada a mano y un habla tan seductor que con dos palabras ya sentía la necesidad de tenerte conmigo para siempre. Tenias una personalidad tan imponente que me hacías sentir segura al lado tuyo, me hacias sentir que todo iba a estar bien y que no me tenia que preocupar por lo que iba a pasar mañana.
Puedo jurar por mi vida que no había sensación mas linda que dormir en tus brazos con mi cabeza apoyada en tu pecho sintiendo tu respiración en mi pelo.
Se me hace imposible explicar con palabras lo segura que me sentía con vos, todos esos complejos y todas esas inseguridades se iban con tan solo rozar tus labios con los mios, sentía que podía tocar el cielo con las manos, que podía volar sin la necesidad de tener alas y que podía compartir tus vicios como si fueran mios.
Me diste una nueva perspectiva, y en cierto modo lamento que me hayas influido tanto porque se que me amabas (a tu manera) y eso me llenaba el alma. Una pena haberte conocido en estos tiempos, en lo que nada dura, y en los que las promesas se van tan rápido.
Me quedo tranquila pensando en que ya nos vamos a encontrar simplemente esta no es la hora y no es el lugar.  

Reflexiones DolorosasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora