»Butterfly« [Park Jimin; BTS]

III

Cerré la portátil; me lastimaba la vista.
Estaba demasiado cansada, me había levantado tan temprano para ir al instituto.

Me dirigí a la cocina, abrí el refrigerador -mi precioso- y cogí un cartón de jugo de naranja. Cerré la puerta y volteé a ver a la mesa, no había agarrado mi vaso. Moví los hombros con desinterés y tomé el jugo directamente de la caja.
Tenía el buche lleno, cuando escuché unos golpes bruscos en la puerta.
Caminé, cabreada, hacia ella.

—¿Qué coño quieres? — dije, limpiándome de la mandíbula el jugo que había escupido por el susto.

—¡Hay que organizar lo del viernes! — gritó Sohyun, entrando como si nada a la casa, acompañada de Hoseok.

—Soh, no me jodas, tenemos toda la maldita semana.

—Por eso tus calificaciones son bajas, todo lo haces a último momento y no lo haces bien — se sentó en el sofá junto a Hobi.

—Straight throught my heart — dije, llevándome la mano al corazón a modo de ofensa.

—Lo lamento, pero es verdad.

—¿Cómo la has aguantando tanto tiempo? — miré a Hoseok.

—No lo hago, la dejo ser — contestó él.

—Vale, pero no griten, que Yoongi está probablemente durmiendo.

—No, no lo hago — mi hermano bajaba las escaleras tallándose los ojos — ya no más. No sé qué hacen, pero me les uno.

—Estamos organizando una fiesta en la laguna el viernes, ¿quieres venir? —dijo Sohyun.

—Claro, por qué no. Pediré permiso en el trabajo.

—Soh, ¿por qué haces tanto rollo? ¿No pudiste solamente escribir nombres al azar y mandarme la lista? —dije dejando mi cabeza caer, no tenía ganas de nada en ese momento.

—No, maldita sea Min Kimhyun, eres tan testaruda y desinteresada.

—No comprendo aún cómo eres mi amiga.

—Yo tampoco, pero lo soy. Y la mejor.

Reí desganadamente.
Comenzamos a hacer la lista, yo sólo decía los pocos nombres que me había aprendido, aunque no supiera quiénes eran.
Me levanté a la cocina a seguir tomando mi jugo. Ya estaba aburrida, demasiado, y Sohyun y Hoseok no daban señales de querer irse aún.
Regresé al sofá, me aventé a este con una pierna doblada y el brazo estirado; recargué mi cabeza y cerré los ojos.

—¡Eh, Kimhyun! — sentí algo ligero caer hacia mis piernas, era la libreta de Soh — La lista está terminada.

Comencé a leerla, había demasiados nombres, parecía que Sohyun iba a organizar algo más que una reunión en la laguna.
Mis ojos se movían de un lado a otro, pero pasaron en seco.

—¿Chanyeol? ¿Ese idiota? — aventé la libreta de vuelta a Soh.

—Sí. Mira, sé que te molesta, aunque hayas convivido con él menos de dos minutos, pero querida, lo hago por interés.

—¿A qué te refieres? — pregunté perdida.

—Verás, conozco a Yeol desde que era pequeña. Éramos vecinos y su mamá y la mía eran las mejores comadres de la cuadra y la señora Park me amaba. Ahora, vivimos a cinco minutos de distancia en tiempo, pero la señora le pide a Chanyeol que nos lleve comida y pues mi mamá hace lo mismo.

—Espera, ¿Chanyeol va a tu casa? —dijo Hoseok sintiéndose engañado.

—Sí, relájate, no entra, con suerte pisa el primer escalón —Soh le aventó un cojín a Hobi en la cara — El caso es, Chanyeol sigue siendo un niño de mami, así que no sale, sin su madre saber a dónde. Mientras ella sepa que va a un lugar donde estoy yo, más comida o detalles me dará.