El Hombre De La Cabaña [Completo]

Capítulo 2: Motel "BuenaVista"

Michael

Estoy sentado esperando a que lleguen los chicos a recogerme, mientras veo las agujas del relój dar vueltas. Luego de unos minutos, escucho la bocina del coche sonar. Agarro mis cosas y subo inmediatamente en él.

Mientras vamos a Richwood, los chicos empiezan a jugar verdad o reto. Christopher tiene que contar su primera relación sexual, tocar bocina a las señoras mayores de edad que caminan por las veredas de nuestros costados y fumar un cigarrillo inhalándolo una sola vez. Mara tiene que beber un vaso de vodka mezclado con jugo de manzana. Lamer el pie de Lucila y contar lo más vergonzoso que le pasó en el colegio. Lucila tiene que comer una manzana con sal. Gritar a las personas que pasan a nuestros costados y dibujar un león en un papél. Y yo tengo que besar a Lucila, decir cuál fue mi primer beso y decir lo más estupendo que me pasó en secundaria.

-Para aquí -dice Lucila cuando ve una estación de servicio-. Tengo que comprar algunas cosas.

Ella baja, y Christopher también, aprovechando para ir al baño ya que con el apuro se le había olvidado ir. Mara parece más nerviosa de lo común, pues sus manos están sudorosas y sus mejillas rojas.

Cuando Lucila vuelve, vemos que tiene una camisa que dice "I Hate Donald Trump" y el dedo del medio levantado. Pasamos unos diez minutos antes de que paremos de reir y volvamos a seguir nuestra ruta.

Pasa tanto tiempo de que salí de mi casa, que se hace de noche y la tormenta nos obliga a parar en un motel a descansar. Esto hace enojar a Mara, pero no tiene más remedio que hospedarse en una habitación, y dormir.

Christopher y Mara comparten una habitación, y Lucila y yo otra.

No tengo tiempo para pensar en nada más que acostarme y dormir, y eso es precisamente lo que hago.

Al levantarme, observo que Lucila está dándose una ducha. Suena tentativo observarla, pero la respeto, y voy a desayunar junto con Christopher y Mara.

Cuando terminamos de desayunar, acompaño a Christopher a pagar la noche de hospedaje y observo en un cartel un hombre sonriendo y unas palabras que dicen "prohibida la entrada".

No le doy mucha importancia y salgo del motel listo para subir al coche y seguir nuestra ruta.