tres

756 133 130
                                    

El reloj indicaba las 05:00 m lo que quería decir que los padres de Jenna dormían como troncos y era el momento perfecto para que Tyler entre por su ventana.

Sabía lo que le esperaba y estaba ansioso. Tendría sexo con una de las chicas más lindas del campus ¿cómo no estar feliz?. Nunca había ido a la casa de ella, pero con toda la descripción para subir y de la casa que le dio le servirán de algo.

El caminaba como si hubiera ganado la lotería a pesar de lo que había ocurrido con Josh Dun y por eso era un gran motivo para desquitarse, digo, sacarse todo el peso de alguna forma. Cuando llegó, miro bien la casa y busco el árbol que ella le había descrito.

Era un muy alto y la ventana de Jenna era la segunda. Se mareó al solo verla ya que le daba temor un poco de altura, pero necesitaba urgente un buen polvo y era capaz de hacer todo para subir a hacerlo.

Contó hasta tres, rezando por no caerse y quebrarse, si, era todo un paranoico. Subió al árbol y se guió de cada rama para fallar. Llego hasta el borde de la ventana y la abrió como ella le había indicado, entrando despacio a su habitación.

Todo estaba oscuro, no podía distinguir   nada. Sintió el borde de la cama y escucho como Jenna soltaba un par de ronquidos.

No espero mucho, ella sabía que el iría. Se abalanzó sobre su cuerpo, besándola. Fue correspondido, le sorprendió al no sentir un bulto debajo de él, ya saben, los pechos. Bajo sus manos por los brazos de ella, y eran demasiado duros, sintió las manos gruesas de ella en su pecho y entonces en ese momento se animó a abrir los ojos.

No, no podía ser.

Se separó rápidamente, cayendo atrás de la cama, haciendo un ruido fuerte. La luz se prendió de golpe.

Josh vio a Tyler y Tyler a Josh.

Los dos gritaron.

-¿Qué mierda haces aquí Joseph?.-gritó alterado. Tyler no sabía a dónde mirar, estaba demasiado nervioso.- Maldito maricon.-dijo con desprecio mirando al chico que estaba en su habitación alterado.

-¡Creí que era la casa de Jenna!.-se excusó, se encontraba muy nervioso, todo estaba en juego.- Creí que tú eras ella, mierda.-le dijo gritando. Josh rodó los ojos.- Tu me seguiste el beso, ¿cuál es tu excusa?.

-¡Yo creí que eras Emma Watson!, estaba dormido, estupido.-dijo obvio, Tyler llevo sus manos a su cara, tapándola en modo avergonzado.- ¿Qué mierda iba a saber que tú tenías impulsos gay a las...-miro su reloj.- 5 de la madrugada?.

-¡Y yo que iba a saber que vivías en una casa igual a la de Jenna!.-le respondió en el mismo tono.

-¡Eres gay!.-afirmó, riendo al mismo tiempo. Podía tener a Joseph en sus manos con esta noticia.

-¡Me confundí de casa!.-gritó enojado.- Tu me seguiste el beso, eso es más gay.

-Te dije que estaba dormido, cualquiera sueña lo que quiere.- Tyler soltó una risa.- Agradece que mis padres no están.

-¿Por qué por fin sabrían que eres gay? Ya Josh, sal del closet. ¿No está muy oscuro ahí adentro?.- dijo Tyler gracioso, Josh lo miró mal.

-¿Quieres que meta mi pie de una patada en tu culo así vemos que lugar está más oscuro?.-preguntó irritado. Tener a Joseph en su habitación después de haberlo besado le podía alterar demasiado.

-Ya tienes que salir con comentarios gay.-dijo riendo al ver la cara enojada de Josh.

-¿Qué haces que no te vas?.-preguntó rodando los ojos.

-¿No dirás nada de esto a nadie?.-preguntó. Josh lo pensó un rato, era obvio que no le convenía decir nada ya que él había seguido el beso.

-¿Sobre qué?.-dijo. Tyler asintió entendiendo lo que quería decir. Sonrío y se dirigió a la ventana para salir.

-Joseph.-llamo, él se dio media vuelta ya con un pie afuera.- Sal por la puerta, por favor.-indicó apuntando su puerta blanca. El avergonzado asintió, saliendo por la puerta dejando atrás el incómodo momento.

¿Cómo le vería la cara ahora en los pasillos de la escuela?, ¿en los entrenamientos?. Se sentía muy avergonzado, no era normal colarse a la casa de tu enemigo y besarlo.

No tenía ganas de ir hacia la casa de Jenna ya, quería dormir y olvidarse de todo el momento que acababa de pasar  pero tenía que hacerlo, no podía perder la oportunidad de hacerlo con una de las chicas más lindas de todo.

Cuando salió de la casa de Josh, busco la casa con numero 320, hasta que la encontró.

Era la del frente, suspiro cansado al ver el árbol. Suspiro de nuevo, dirigiéndose  hacia ahí y cansado volvió a trepar, haciendo todo de nuevo.

Subió la ventana, pasó al cuarto, esta vez prendió la linterna de su celular y vio a Jenna dormida en su cama. La movió dulcemente, y ella se dio la vuelta cansada.

-¿Dónde estabas?.-preguntó, prendiendo la luz, hablando en un susurro.-

-Una equivocación-dijo en el mismo tono, acercándose más a ella. Lo miró extrañada, esperando que explique la situación.- Larga historia.-fue lo único que hizo antes de besarla con demasiada intensidad.

Tal vez, solo tal vez, imagino a Josh. Su mente estaba jugando con el y recreo la imagen en la habitación del teñido.

Imágenes mentales por esta vez, fuera.

sømëtîng;jøshler Donde viven las historias. Descúbrelo ahora