Aurelio le pidió a su hermano Javier que lo acompañara, para que el condujera mientras Aurelio grababa y tomaba fotos del área, narrando lo su experiencia en una especie de video.
-Sabes algo hermanito?...de todas las cosas que me has pedido esta es la más loca de todas, no te dan miedo las leyenda acerca de esa vieja carretera?
-No seas cobarde Javier, ya sabía que te daría miedo, pero para tu seguridad iremos de día, solo quiero hacer una investigación, y de paso desmentir las historias, tu manejas mientras yo filmo y tomo fotos esta bien?
-Esta bien, saldremos mañana temprano, porque ni loco estaré alli de noche.
Asi pues, los jóvenes salieron al día siguiente según lo planeado, alrededor de las 10:00 am, ya estaban saliendo de la autopista e ingresando al viejo camino, esta calle no estaba rodeada por arbole ni nada que pareciera ser tenebroso, simplemente era un camino que ya nadie utilizaba, mientras Javier conducía, Aurelio filmaba y narraba lo que veía, lo cual no era mucho, Javier sonría un poco al pensar que tal vez su hermano perdía el tiempo en aquel lugar.
Al cabo de unos minutos de haberse adentrado en el camino, algo llamo la atención de Javier, el auto comenzó a perder fuerza, toda el motor se apagó como si nada y se detuvo en medio del camino.
-Que sucede Javier, que acaso no lo revisaste antes de salir?
-Si lo hice, esto no había pasado antes, y por aquí cerca no hay nada, porque mejor no bajamos del auto, tu continúa grabando mientras yo reviso el motor a ver que pasa esta bien?
-Esta bien!
Aurelio avanzó algunos pasos, alejándose un poco de su hermano quien seguía tratando de descubrir el problema con el auto, y fue entonces cuando para su asombro, frente a el apareció una escena digna de una pesadilla. Se trataba de la aparición en el camino de cientos de aves, roedores, e incluso animales como zorros muertos en la calle, Aurelio se giró para avisarle a su hermano sobre su macabro hallazgo, pero ni su hermano, ni el auto estaban allí ya, habían desaparecido, Aurelio lo llamaba desesperadamente, pero era inútil, estaba totalmente solo.
En ese momento, a pesar de que era casi mediodía, una penumbra invadió el lugar, dejando a Aurelio en una casi total oscuridad, visiblemente nervioso y asustado por la nueva situación que se le presentaba, Aurelio no tuvo mas remedio que utilizar la luz nocturna de su cámara para tratar de ver sus alrededores, era difícil caminar para el, porque al enfocar al suelo para dirigir sus pasos, tenía que sortear la gran cantidad de animales muertos que le rodeaban, había un hedor a podrido, sin embargo no siquiera las moscas vivían en aquel lugar, era una verdadera calle muerta como se le llamaba, pero lo peor estaba por venir, Aurelio temblaba de miedo, sin poder encontrar el camino de regreso, y muchas voces, como murmullos, se empezaron a escuchar, murmullos que provenían de entre aquella oscuridad a pleno mediodía.
Utilizando la cámara de manera alocada debido al miedo que sentía, Aurelio no podía enfocar claramente, mientras seguía llamando a su hermano, logró ver al menos dos personas paradas frente a el dándole la espalda, lo cual hizo que de su boca saliera un grito ahogado, para luego quedarse petrificado enfocándolos, sin embargo ninguno se giraba, Aurelio se percató de un raro movimiento en las piernas de los dos individuos, y al enfocar para poder ver que era, resultaron ser unos enormes gusanos que ya estaban comiendo la carne podrida de ambas apariciones.
-Quien...quienes son ustedes?...preguntó Aurelio con voz temblorosa.
Ambos seres dieron vuelta lentamente, y fue cuando el pobre Aurelio vio que aquellas cosas eran el y su hermano, pero que parecían haber muerto hace ya algún tiempo, sus rostros y cuerpos estaban llenos de gusanos y carne podrida, era una visión espeluznante, pero no tuvo tiempo de analizar nada, porque esos dos sin ningún aviso, iniciaron una persecución a Aurelio, el cual corría lo más rápido que podía para tratar de escapar de los cadáveres de el y su hermano, que se pudrían mas y mas a medida que avanzaban.
Aurelio divisó una luz al frente, y al acercarse corriendo, resultó ser su hermano, aún revisando el auto, aún en pleno mediodía, como si no se hubiera dado cuenta de nada de lo que le pasaba a Aurelio, era como si Aurelio al haber avanzado y alejado un par de pasos del auto, hubiera entrado en otra dimensión, una que no era más que un infierno, el infierno de la carretera de muerte.
Aurelio gritó lo más fuerte que pudo para llamar a su hermano, para advertirle de que no se alejara del auto, que no se adentrara mas al camino, antes de caer al suelo y ser alcanzado por los cadáveres quienes mordían su cuerpo con frenesí, Aurelio nunca se imaginó que el venir a este lugar le causaría una muerte tan aterradora y extraña, pero antes de perder finalmente el conocimiento, intentó alertar a su hermano, lanzando su cámara fuertemente hacia la luz, muriendo luego de que su propio cadáver mordiera su cuello.
Su hermano por lado, no tenía idea de lo que acaba de pasar a Aurelio, recién saco su cabeza del motor del auto para hablarle a Aurelio, para Javier, si acaso habían pasado unos segundos desde el momento en que Aurelio salió del auto.
-Oye Aurelio, no quiero ser morboso ni nada, pero creo que esta maldita carretera es la que ha causado que al auto no funcione, no crees?...Aurelio?...donde estas?
Javier estaba sorprendido y preocupado por no ver a su hermano por ningún lado, si hace apenas unos segundos estaba allí, sin embargo lo que si pudo ver con el reflejo del sol, fue la cámara que tenía Aurelio, haciéndolo dar unos pasos mas adelante para recogerla.
-Que extraño, que hace aquí su cámara?...hermano...HERMANO!!
No hubo respuesta de Aurelio, Javier tomó la cámara y le dio "play" solo para encontrar estática, nada figuraba grabado, el error que cometió Javier fue alejarse unos pasos del auto, rápidamente el día se volvió noche, quedando cubierto por la oscuridad, iniciando su particular infierno en la carretera de muerte.