Capitulo 8

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Narra Nina:

Me caí y Gaston me levantó y me sentó en mi cama, yo estaba tan avergonzada que no dejaba de repetir: SOY UNA TARADA, SOY UNA TARADA.
Entonces sentí que Gaston seco una lágrima que cayo de mi ojo y me miro y me abrazo lo mas fuerte que pudo. Entonces yo me calme un poco cuando nos alejamos nuestros labios quedaron tan cerca que sentí que ese seria mi primer beso, pero entonces en el momento mas oportuno tocaron la puerta Gaston se alejo rápidamente y yo grite: PASE, entonces entro Amanda.

-Amanda: ¿señorita se le ofrece algo?
-Nina: ¿Gaston quieres algo?
-Gaston: estarían bien unas palomitas y unas malteadas para ver las pelis.
-Nina: entonces eso Amanda

-Amanda: esta bien señorita. Y no se olvide de tomar su medicamento.
Entonces Amanda salio del cuarto.

Narra Gaston:

Justo cuando nuestros labios estaban a menos de dos centímetros, tocaron la puerta, era su mucama ella entro y pregunto si se nos ofrecía algo, yo le pedí palomitas y malteadas para la peli. Cuando ella se fue me senté a la par de Nina y le entregue el oso que le había comprado, ella me agradeció con un beso súper tierno y sus ve en la mejilla.
Entonces le dije agarrando mi mochila:
-G: estás son las pelis que traje ¿cual te gusta mas?
-N:a ver decime
-G: bueno traje el conjuro 2, posesión Infernal y Anabel
-N: aaaaa pero son todas de miedo
-G: si
-N: no me gustan esas películas después no puedo dormir a la noche.
-G: pero estarás conmigo. No te pasara nada.
-N: seguro?
-G: si súper seguro nunca dejare que te pase nada princesa...
Y justo entro Amanda con las palomitas y la malteadas.
-A: acá están señorita Nina
-N: muchas gracias Amanda, ya esta bien retirare gracias.
-A: si, cualquier cosa me avisan.
-G: si gracias.

Narra Nina:

Cuando Amanda salio le dije a Gaston que pusiera la peli en el dividí de mi habitación el lo puso el conjuro 2 y se sentó a la par mía en mi cama bien empezó la película yo levante la colcha y me metí bajo ella. Yo odio las películas de terror, siempre que puedo luego no puedo dormir, entonces Gaston me empezó a hacer cosquillas, yo le repetía todo el tiempo: BASTA GASTON, YA BASTA, entonces luego de unos 3 minutos paro, me dolía la panza de tanto reírme

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