Deseos

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La campana sonó, y la última clase del día se dio por terminada, todos se levantaron de sus pupitres, arreglando sus cosas listos para irse a casa

Donghae dejó salir un suspiro pesado y recogió las hojas del problemario, las apiló y juntó, dando dos que tres golpecitos sobre la banca de madera, >había sido un día largo, la última hora siempre era la más pesada, todo el mundo quería irse a casa, y el... él quería simplemente desaparecer<, la escuela se había tornado monótona desde el día que llegó del hospital, y cada que recorría los pasillos o incluso cuando iba al baño, lo veía a él, lo que era gracioso, siendo que, Eunhyuk extrañamente acudía al escuela, pero su cerebro parecía no querer dejar de insistirle con ello

-Hae- lo llamó Min, >realmente ya no sabía cómo lidiar con la cara de lástima que el rubio le dirigía cada que le hablaba, ¿tan mal se veía?, aunque, posiblemente se pensara que había salido de algún tipo de relación "de maltrato" con Eunhyuk< bufó internamente, la relación más cercana que había tenido con era de conocidos, y ahora posiblemente él le odiara

Sin ánimos de contestar sólo alzó la mirada para mostrar que le estaba escuchando, poniéndole atención, >aunque no fuese así en absoluto<

-¿Quieres que te lleve?, Siwon mencionó que su tía no podría prestarles el coche- preguntó con algo de incomodidad por la actitud del castaño

Donghae negó –puedo caminar ¿sabes?- contestó cortante y se levantó, reafirmando su punto, tomó él mismo su silla de ruedas, colocando en ella su mochila y la condujo fuera del aula

–no recordaba lo de tu tía- le dijo a Siwon, que lo había estado esperando fuera del salón, éste dio un leve asentimiento

-nos las arreglaremos pez, el subterráneo nos deja bastante cerca de su casa, y me llamado para pedirme que pasara por el coche

-pensé que no podría prestártelo hoy- contestó el castaño, dirigiéndole una dudosa mirada

-sólo durante la mañana- El moreno respondió y siguió caminando rumbo a la salida, ahora siendo él quien empujaba la silla

Cuando finalmente salieron y hubieron caminado algunas cuadras, Donghae pudo respirar correctamente el aire, >no había olvidado lo que había venido a hacer, claro que no, su vida en Seúl dependía de la beca< pero, aún teniendo eso en cuenta, tenía que aceptar que le costaba ponerse al día después de su tiempo en el hospital

Continuaron caminando en silencio agradable, con pasos lentos, >ya que Donghae no podía ir a más velocidad< cruzáron por el medio del parque cercano, viéndo a los niños jugar y corretearse mutuamente, un vendedor de helados... los coches, las personas

Hasta que la entrada del subterránea apareció frente a ellos, el castaño detuvo su andar y miró hacia abajo por las escaleras, apretó sus labios pensativo

-¿Puedes bajar las escaleras?- giró a verlo Siwon, notándo la falta de su presencia a lado suyo, el menor asintió decidido y se aferró al barandal, con sumo cuidado apoyó un pié, seguido de otro y otro más, hasta que encontró un ritmo agradable, sin tener la necesidad de poner peso de más sobre una sola pierna

-no puedo creer lo mucho que he tardado- se quejó al llegar al final de la escalera, en casa trataba de hacerse el valiente y pasearse de ida y venida, pero francamente su espalda baja aún dolía, no podía caminar distancias largas, así como tampoco podía bajar ¡unas puñeteras escaleras!, todo aquello le estaba colmándo la paciencia, se sentía encerrado en sí mismo

Siwon escuchó la queja, y vió el rostro tanto desanimado como fúrico de su amigo –es cuestión de tiempo –le alentó, sabiéndo completamente cómo se sentía, cuando él se había roto el tobillo, no pudo caminar correctamente en un mes, y la única palabra para describirlo era "frustrante", Donghae le miró y asintió finalmente, decidiéndo continuar con su camino

My Bad Boy [Eunhae +18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora