Capítulo 20

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–Niall, ¿a dónde vamos?–seguí caminando de la mano de Niall intentando no caerme.–¿y por qué tuviste que vendarme los ojos?

–Te dije que es una sorpresa, ¿ya puedes dejar de hacer preguntas?–escuché responder a Niall a mi lado.

Él me llevaba de la mano hacia algún lugar, pero yo no podía ver nada.

Seguimos caminando hasta que se detuvo.

»Ahora dime, ¿tienes alguna idea de dónde estamos?–preguntó y a juzgar por el sonido de su voz, supongo que se posicionó detrás de mí.

–Bueno, a juzgar por el piso,–di dos patadas al suelo–por el ruido y por todo lo que he caminado, creo que estamos en el bosque.

Niall rió.

–Estás en lo correcto, amor.–colocó sus manos en la venda que cubría mis ojos.

–Siento que caminamos muchísimo.–dije mientras él poco a poco la iba desatando.

–No cariño, solo caminamos unas dos cuadras.

Desataba cada lazo mortalmente lento y yo moría por dentro, estaba muy impaciente por descubrir el motivo de todo esto y me daban ganas de gritar para que se apresurara.

–Niall, por amor a Dios, ¿puedes apresurar-te?

Sentí como la venda cayó a mis pies y abrí los ojos, en efectivo, estábamos en el bosque. Estaba una mesa decorada con un mantel blanco y adornos florales azules, encima de ella abían dos platos y dos copas, y al rededor estaba decorado con flores de distintos colores y tamaños.

Me quedé helada por un momento y comencé a dar cortos y pequeños pasos hacia adelante mientras observaba cada detalle que Niall había hecho para mí.

¿Qué significaba esto?

–¿Te gusta?–Niall me abrazó desde atrás apegando-me más a él.

–E-esto... Es... M-Me encanta, Niall.–me volteé para tenerlo frente a mí. Envolví mis brazos en su cuello y lo besé tiernamente.

Él me respondió el beso mientras posicionaba sus manos en mi cintura y con su lengua, pedía acceso a mi boca.

Se lo concedí.

Pero nos separamos por un momento para tomar algo de aire.

Deposité pequeños besos en toda su cara.

–Te amo tanto.–lo abracé más fuerte.

–Te amo más, _____. Por eso hice esto, para demostrarte cuánto te amo y cuánto me importas.

Sentí mi corazón latir a millón en ese momento, era... Tan perfecto estar ahí con él.

»Vamos a sentarnos.

Me agarró la mano y me llevó hasta una de las sillas. Me senté y él la movió hacia adelante por mí.

–Wow, qué caballero.–dije bromeando.

–Todo caballero necesita atender a su dama.–se sentó y sonrió.

Le devolví la sonrisa y sus azulados ojos me miraron fijamente.

»Necesito preguntarte algo, ____.

Este suspenso no me gustaba para nada, pero mantuve la calma y asentí.

–Claro, ¿dime?

Niall se me quedó mirando a los ojos por unos 3 minutos hasta que finalmente dijo.

–¿Eres feliz conmigo?

Lo preguntó como si le doliera hacerlo, o como si le doliera saber que la respuesta no era la que él quería.

El Mejor Amigo de mi Hermano. [NIALL HORAN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora