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-¿Por qué no en Starbucks?- pregunté mordiendo mi dona

-¿Por qué estás tan tranquilo con esto?- dijo sentándose en el asiento del copiloto de piernas cruzadas, hacia mi dirección- ¿y si me descubren y te acusan de secuestrarme?- preguntó

-Y sí tú prefieres escaparte con un desconocido, a tu vida diaria, ¿por qué no te tomaste unos días antes?- pregunté

-No es tan fácil- se quejó dando un mordisco brusco a su dona

-Hey, la dona no tiene la culpa- defendí la comida con diversión

Me miró mal por un momento y metió toda la dona en su boca sin compasión.

-Qué salvaje- achiné los ojos y tomé un sorbo de mi café

-¿Qué cenaremos?- preguntó con el vaso de café pegado a sus labios

-Acabamos de comprar comida- dije mirándola raro

-Bueno, claramente yo ya no tengo comida- dijo señalando su lugar

-¡Eso es porque asesinaste esa dona en segundos!- le dije

-Ya, no grites- entrecerró los ojos y recostó su cabeza en el respaldo del asiento

Terminé mi café y encendí la radio. En seguida, una canción de Ariana se empezó a escuchar.

-¿Me tienes en tus favoritos?- sonrió con los ojos cerrados

-Claro que no, es la radio- dije bajando un poco el volumen

Ella tarareaba al ritmo de su canción, diciendo alguna que otra letra en el medio.

-¿Cómo se llama?- le pregunté

-Just a Little bit of your heart- contestó- ¿por qué? ¿La quieres agregar a tu lista de reproducciones?- preguntó

-...Tal vez- dije

Ella giró su cabeza hacia mí y sonrió.

-La escribió un amigo- comentó

-Es muy buena- dije

-Lo es- concordó

-Bueno, tendrías que empezar a manejar- dijo ella

-¿Puedes manejar tú?- pedí

-Seguro, ¿quieres morir?- dijo con voz calma

-No debes de ser tan mala- dije

-Claro que no, pregúntale a mi maestro de conducir- sonrió

-¿Tienes licencia?- le pregunté

-Sí- contestó

-Eso era todo lo que quería oír- le dije saliendo del auto y caminando a su lado

-¿Cuál es tu problema con manejar?- preguntó al agarrarla por debajo de los brazos y sacándola del asiento para poder sentarme en él

-Estuve manejando dos días, quiero un respiro- suspiré

-¿Y en ese respiro quieres morir?- cruzó los brazos aún parada al lado del auto

-No sé por qué dices que eres tan mala- le dije

Besos xo

DriveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora