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-Yo diría que fuéramos a comprar más comida porque ya no queda casi nada- dijo ella

-Bien, pero yo la pagaré- dije dando una vuelta con el volante

-No, yo lo haré- dijo

Iba a protestar, pero ella interrumpió mi oración.

-Y fin de la discusión- levantó un dedo

Rodé los ojos y dije un "mujeres" por lo bajo.

Llegamos a una tienda y comenzamos a tomar todas las cosas que creímos serían necesarias.

-Serán cincuenta dólares- dijo la cajera

-Tenga- dijo Ariana entregándole su tarjeta

-Oye, sé que te molesto mucho con este tema, pero por favor- dije enfatizando el "por favor"- llama a tú familia, por lo menos diles que estás bien- le pedí

-Shhh- dijo poniendo su dedo índice en sus labios y alejándome un poco de la cajera- ya te dije que no- contestó

-Pero ¿por qué no?- pregunté- diles que estás bien y listo- dije

-Es que tú no conoces a mis padres. Ellos me atomizarán a preguntas una vez que les hable, rastrearán mi teléfono para saber dónde estoy, y no solo son mis padres. Ellos le dirán a la prensa que sigo viva y todos se volverán locos buscando- dijo rápidamente y quedando sin aire

-¿Qué no te gusta tu vida?- pregunté

-Ya te dije mil veces que quería un respiro, y no me iban a dejar tener unas vacaciones si lo pedía, así que tomé la oportunidad que me diste...- dijo

-Sí, ¿pero no extrañas...?- empecé

-Disculpe, señorita- me interrumpió la cajera

-¿Sí?- preguntó Ariana

-Su tarjeta ha sido cancelada- le comunicó la cajera

Ariana frunció las cejas y apoyó una mano en la mesa de la caja mientras que la otra descansaba en su cintura. Entrecerró los ojos y sus labios se hicieron una línea.

-...Disculpe- rió ella- ¿qué?- preguntó

-Que su tarjeta ha sido cancelada- repitió

-No, no, es imposible- negó Ariana sonriendo- pruebe de nuevo- le pidió

-Pero ya probé tres veces y no...- fue interrumpida

-¡Pruebe de nuevo!- gritó Ariana- perdón, perdón...pruebe de nuevo por favor- volvió a pedir

La cajera volvió a intentar pero la tarjeta fue denegada.

-Puede llamar al banco, señorita, pero no puedo hacer nada con un pedazo de plástico- dijo la cajera

-¿Pero cómo es posible?- gritó Ariana

-Está bien, está bien, yo pago- dije sacando mi tarjeta y dándosela a la cajera

Finalmente pagamos y salimos del lugar con las bolsas, dirigiéndonos al auto.

-No puede ser que me hayan cancelado la tarjeta- dijo abriendo la puerta del auto- voy a llamar a mi madre- dijo sacando su celular

-Al fin- suspiré apoyando

Besos xo

DriveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora