Drive

-4-

-Oye...hey, despierta- moví un poco a Ariana para que despertara

-Mmm...- dijo y se acomodó más en el asiento

-No, no vuelvas a dormirte- la sacudí un poco más

-¿Qué hora es?- preguntó aún sin abrir los ojos

-Las doce de la noche- contesté desperezándome

-¿Qué?- abrió los ojos- ¿estuviste manejando por siete horas?- preguntó sentándose bien

-Muy bien, sabes contar- le aplaudí

Ella rodó los ojos y golpeó mi brazo con el dorso de su mano.

-¿Para qué me despertaste?- bostezó

Le señalé un lugar fuera de la ventana y ella llevó su mirada hacia el lugar.

-¿Un motel?- preguntó

-Lamento no ser millonario como tú y no poder pagar un súper hotel en la polinesia, pero esto es lo que hay- sonreí sin ánimos

Achinó los ojos mirándome por unos segundos hasta que bufó y tomó el pestillo de la puerta.

-Todavía no entiendo por qué no me dejaste irme antes- se quejó saliendo

Copié sus acciones y salí del automóvil siguiéndola.

El lugar no estaba tan mal, tenía una vibra hipster, lleno de luces rosadas.

-Dos habitaciones- escuché que a lo lejos Ariana pedía, mientras se ponía unos lentes de sol

Me acerqué a ella y el hombre detrás del mostrador habló.

-Lo siento, solo quedan dos habitaciones de dos plazas para una persona- contestó el hombre concentrado en su computadora

-...Bien, tú duermes en el suelo- giró a verme, pero antes de poder quejarme volvió a hablarle al hombre- deme una- dijo

-Muy bien...- dijo el hombre tecleando en su computadora- cien dólares- dijo

-¡¿Cien dólares?!- exclamé

-Sí, cien dólares- me miró el hombre

-De acuerdo...Hank- dije viendo la plaquilla en su remera- espero que tenga baño- suspiré sacando la tarjeta de crédito

-Seguro que sí- dijo este, riendo

Mientras Hank hacía el papeleo, en la tele se mostraron las noticias.

-Se vio a la cantante y actriz Ariana Grande entrando a su auto en Hollywood hace unas siete horas. Pero momentos después, un hombre identificado por la policía como el brabucón que lleno de pintura al presidente minutos antes, irrumpió en el vehículo de la joven, no solo robando el automóvil, pero también secuestrando a la estrella- dijo la muchacha de las noticias

Abrí mucho los ojos y miré a Ariana, que estaba rascando su frente con una mano.

-Bien, aquí está su tarjeta- dijo Hank levantando la mirada y entregándome la tarjeta- y aquí está la llave...- dijo ahora mirando a la chica a mi lado, pero paró de hablar al observarla más detalladamente

-Esperen... ¿usted es...?- comenzó el hombre pero ella no dejó que terminara

-Nop- dijo tomando las llaves de la mano del hombre y saliendo del establecimiento

Hank giró su cabeza hacia mí y habló.

-¿Cómo sabía que iba a decir...?- también lo interrumpí

-¿Ariana Grande? Siempre se lo dicen, gran parecido- dije caminando hacia la puerta

Salí al frío de la noche y busqué por la chica que ya estaba a varios pasos de mí.

-¡Espera!- le grité

Aún así ella no alentó el paso y tuve que correr hacia ella.

-¿Puedes ir más despacio?- pregunté cuando ya casi estaba cerca de ella

-Mis piernas miden cinco centímetros, mientras las tuyas son de dos metros, ¿pero no puedes mantener mi ritmo?- preguntó llegando a la habitación y abriéndola

-Estuve manejando por siete horas, todavía no las estiré- dije cerrando la puerta

-Bueno...no está tan mal- suspiró y se tiró a la cama- aunque no entiendo por qué las habitaciones están afuera- dijo estirando todas sus extremidades por la cama

-¿Por qué no me acusaste con Hank?- pregunté tomando una silla

Hizo una risa nasal y se apoyó en sus codos para verme.

-¿Hank?- levantó una ceja

-Sí, Hank. Se llama Hank- dije

-Bien, mejor amigo de Hank- dijo dejándose caer en la cama nuevamente- no te acusé porque...me parece que necesito un respiro y ¿qué mejor que tomarme unas vacaciones en un lugar desértico con mi secuestrador?- dijo

-¿Así que simplemente vas a olvidarte de todo y dejar que la gente piense que has sido secuestrada?- pregunté

-Emm...sí, creo que eso voy a hacer- sonrió- suena como un plan- dijo

-Suena como una locura- dije parándome para entrar al baño

-Nunca hago locuras, es tiempo de hacer alguna- dijo en voz alta

-Voy a orinar- dije cerrando la puerta

-Asegúrate de embocarle al inodoro- me gritó desde la cama

Besos xo