Amor A Segunda Conquista

Capítulo 13: Explenation.

—Deben ser más cuidadosos —reprendió el mánager de Donghae, mirándonos a ambos, a un lado del mío.

—No pueden ir por todo Seúl como si nada —dijo mi mánager, señalando las fotos sobre la mesa. Aún no se confirmaba nuestra relación ante los medios, y sinceramente lo prefería así. Fui fan, corrección, soy fan... y sé cómo funciona una mente fanática frente la posibilidad de amor con alguien que no era de todo mi agrado. Y yo estoy consiente que no todos me aman...

—Fue mi error —justificó Donghae. Mentiroso.

—Donghae —llamé, queriéndo que dijese que había sido nuestra culpa y que no se volvería a repetir. 

—Como sea, Donghae; quiero que no se vuelva a repetir. No quiero tomar medidas extremas ante todo esto —pidió amable, llevando una de sus manos a su sien para sobarla con movimientos circulares—. No es el momento para que confirmemos una relación, prometemos hacerlo. Tampoco queremos privarlos de eso. Pero la SM no puede tener un escándalo así, ya hay mucho para tapar... sean buenos chicos, ¿si?

Ambos asentimos. Donghae tomó mi mano, bajo la mesa, y dio un leve apretón, que me hizo sentirme nerviosa en lugar de confortarme. Y mordí mi labio. Como siempre. Como de costumbre.  

—¿Cuándo es probable que confirmen lo nuestro? Me gustaría mucho que fuera antes del comeback de Gwise —comentó vagamente, como si fuera una opción cualquiera. ¿Bromeaba, no? ¿Volvemos con eso? La vez que Donghae vio el baile de «Mirror», casi le da un infarto; tal y como Siwon lo había dicho; he de admitir que su reacción y su cara me causaron una pequeña risa pero... vamos, no es para tanto.

—¿Por qué la urgencia, Donghae? —cuestionó mi mánager. Donghae no respondió. No sabía qué hacer, cómo ayudarlo; ya habíamos recibido demasiado sermón.

Las fotos habían sido entregadas a la SM por una página poco conocida, que de casualidad había captado un par de fotos nuestras el día que fuimos a dejar a Danbi al aeropuerto para que regresase a casa. En todas, o la mayoría, salíamos tomados de las manos; a excepción de una que, después de mi despedida con mi hermana, me había ganado el sentimiento y había llorado un poco junto a Donghae en el estacionamiento del aeropuerto. Y había otro par que eran en la puerta del estacionamiento del edificio de su departamento. 

—Señor Yoon —llamó una voz conocida, tocando la puerta. No sé quién eres, pero gracias por cortar toda la tensión. Mi mánager abrió la puerta para ver de quién se trataba. Una rubia chica de quizás veintitantos años estaba de pie frente la puerta negra.

—¿Qué ocurre, Señorita Kim?

—El productor requiere la presencia de la Señorita _______; están por partir a la prueba de grabación del MV de Mirror. 

—Oh... Señorita Yook, puede retirarse. 

Miré a Donghae, que asintió con la cabeza. Su mirada me decía que todo estaría bien. Podía confiar en él. Me levanté de la silla, hice una reverencia para despedirme de todos en la sala y salí. 

~*~

Narrador omnisciente, una semana antes.

—Donghae, al Señor Hong Jin Taek y el Señor Kim Junghoon quisieran hablar contigo —le informó una chica rubia a Donghae, detiendo su camino.

—¿Ahora? —preguntó, consultando la hora en su reloj.

—Sí, los cuatro están en la sala de reuniones 3.

—Está bien —bufó. 

¿Los cuatro? La chica rubia había mencionado a Jin Taek y Junghoo, pero no sabía quiénes erna los otros dos. Caminó por los pasillos del edificio de la SM, yendo directo a la sala que le había mencionado la chica previamente.