SIEMPRE MÍO *#1* [Saga Forever] SUSPENDIDA HASTA NUEVO AVISO

CAPITULO 35

Hola!
Aquí estoy con otro capítulo, espero les guste.
Amo a Romeo Santos, me trae loca con sus canciones.
Como siempre bienvenidas a las nuevas lectoras y gracias por leer.
Siempre espero sus comentarios y su voto
Besos.

CAPITULO 35
El entrenamiento estaba matándome literalmente, mis músculos están tremendamente tensos, quiero simplemente darme una ducha fría y meterme a la cama.

Pero eso sería imposible
Con nuestra victoria en el juego anterior las cosas se pusieron más complicadas ahora, estamos a dos partidos para enfrentar la copa nacional de futbol y estamos muy ansiosos.
Ahora nuestras horas de entrenamiento se habían aumentado con ello el estrés también, ahora, después de dos semanas de estar día y tarde entrenando estoy malditamente listo para poder descansar un poco si quiera, pero también sabía que el entrenamiento era condenadamente importante aquí.

Debíamos saber al pie de la letra nuestros modos de ataque, el plan de juego era tan importante como marcar un Touchdown y esa responsabilidad caía sobre mis hombros ya que como Mariscal de Campo mi trabajo es idear un plan de ataque y dirigir al grupo, por ello estas dos semanas me las había pasado viendo nuestros anteriores partidos tomando nota de todo tipo de errores y cosas que debemos reforzar, además de estar en constantes reuniones con el entrenador para así poder idear más planes de ataque.

Ahora estábamos en la fase de aprendernos nuestras nuevas jugadas y pulir las que necesitaban ser arregladas, por eso el ejercicio físico estaba siendo demasiado intenso, sin embargo, nada que no podamos manejar.

Eso sí, después de dos semanas de estar en arduo trabajo llegaba a casa directamente a dormir, no estaba pasando mucho tiempo con Alenna y eso malditamente me sacaba de quicio. ¡Este es mi trabajo! Pero cuando no puedes estar tanto tiempo cerca de la mujer que amas a veces apesta.
Hoy había decidido sacarla a cenar, hace unas buenas semanas que no lo hacíamos y era una bonita idea además de pasar tiempo con ella podría despejarme un poco y salir de la pequeña rutina que había obtenido en estas semanas de trabajo.

Tres horas después me dirigía ansioso a mi todo terreno para llegar lo más antes posible al departamento y cambiarme una muda de ropa más presentable y elegante, tenía que recoger a Alenna pasadas las siete de la noche.

Me duche, afeite y peine pulcramente, vestí mi más elegante esmoquin; pantalones de vestir negros, camisa color tumbo, una corbata negra y el saco. No me veo mal si me lo preguntan.

Según dicen por ahí ¡ando comestible!

Apresurado me dirijo hacia la casa de Alenna, estoy sobre hora y a mí no me gusta llegar tarde a mis citas menos a una en la que incluye a mi novia.

Pero al llegar lo único que deseaba es haber llegado tarde para no ver la cara idiota que tengo en frente.

⎯ ¿Qué diablos haces en la casa de mi mujer? - siseo mirándolo muy enojado

⎯ ¿Tu mujer? - pegunta Tobias Idiota Cade - ¿se casaron acaso?

⎯ Deja de parecer un sabiondo Cade, sea cualquier intención por la que viniste te aviso que Alenna es mi novia, novia oficial y en una relación muy seria, por si te lo preguntas - exclame tratando de demostrarle que aquí las cosas habían cambiado en muchos sentidos.

Justo después de mi aclaración Alenna surge de la puerta principal y se detiene abruptamente, mirándonos a Tobias y a mí detenidamente.

Algo sonrojada sale hacia donde nos encontramos y saluda amablemente a su ex, con calma empiezo a contar hasta diez, empiezo a inhalar y exhalar tratando de hacer que mis celos se vayan y pueda razonar con un adulto maduro y seguro de sí mismo.