Amada Amanda:
Hoy, otra vez he ido a cenar a casa de Charlie. Espero no estar siendo una molestia, pero, no puedo negarme a la comida de verdad. Los maruchan me están hartando un poco jaja.
Sé que no querrías que te contase lo que pasó pero, esto es más por mí que por ti creo...Cuando estaba cerrando la biblioteca Charlie volvió y me dijo que su mamá había preparado la cena para los tres y que no iba a dejar que se perdiera esa comida, "piensa en los pobres niños de África".- dijo. Y aunque era una mala excusa, no podía negarme ante ella.
Al llegar a casa de Charlie, su mamá me miró asombrada y feliz al mismo tiempo (cómo su hija, lo transmite por los ojos).
+Hola hijo, ¿cómo estás?, no esperaba verte, pasa.- dijo.
-Sí... Bueno... Yo, extrañaba su deliciosa comida.- dije mirando a Charlie con mirada acusadora y ella levantó sus hombros, mordió sus labios y soltó una carcajada.
Hasta ese entonces, no había notado, pero, si estás perdido en medio del desierto por días y entonces ves un pozo y logras beber de esa agua dulce y cristalina y en ese momento, sabes que estarás bien, así es como te sientes al oír la risa de Charlie.
Cenamos, una vez más todo fue ameno, divertido, nada incómodo. Entonces llegó la hora de irme.
-Así qué señorita, ¿a dónde querías llegar con esto?.- dije.
+No sé de qué hablas, creo que me confundí al oír a mamá eso es todo.- respondió sonrojada.
-Voy a fingir que te creo.- dije entrecerrando los ojos.
Entonces su mirada cayó y una lágrima la siguió. (La escena se repite.)
+¿Q-Qué tienes?.- dije, tratando de enfocarme en Charlie y olvidar tu recuerdo.
-Por favor, sólo abrazame, esto no se repetirá.- dijo sin mirarme.
Levanté su barbilla para que me mirara, sus ojos evitaban los míos pero, en un momento, chocaron.
+Aquí estoy.- dije.
Y la abracé, nos abrazamos, por un rato, hasta que dejó de llorar, me dio las gracias y entró a su casa.
A pesar de eso, no he podido dejar de pensar en ti principessa.
No me olvides principessa.
Principito.
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AMADA AMANDA
RomanceEs probable que no existas. Pero no lo creo. Nos hemos visto muchas veces, te he abrazado, nos hemos besado, esas cosas no pueden ser falsas, estos sentimientos son reales, nosotros no podemos no existir. No me olvides principessa.